El paciente no inte­graba el grupo con­siderado de riesgo y tampoco presentaba nin­guna patología de base, según confirmó el minis­tro de Salud Pública, Julio Mazzoleni.

Si bien, las personas de 60 años en adelante y las que presentan alguna enferme­dad de base son considera­das como el grupo de riesgo y por ende, como las que corren mayor peligro ante la COVID-19, este nuevo virus va demostrando que no existe una teoría única para estudiarlo o enten­derlo.

Hasta el miércoles, las esta­dísticas indicaban que el 100% de los fallecidos en Paraguay superaban los 60 años y presentaban alguna patología; sin embargo, este Jueves Santo se confirmó la primera muerte fuera de estas características: un hombre de 50 años que no padecía ninguna enferme­dad previa.

No fumaba, no sufría de hipertensión, ni diabetes, ni asma. En síntesis, era un hombre sano, confirmaron fuentes del Ministerio de Salud.

El paciente vino del exterior y se encontraba internado en cuidados intensivos de un sanatorio privado. Triste­mente, se convierte en el falle­cido más joven por COVID-19 en nuestro país y su caso com­prueba que este nuevo virus no solo es capaz de matar a gente mayor y enferma, sino a cualquier persona.

“Vamos aprendiendo, es una enfermedad que cada semana nos trae una nove­dad”, reconoció en entre­vista con el Canal GEN el director de Vigilancia Sani­taria, Guillermo Sequera, en relación al compor­tamiento de la COVID-19. Paraguay registra 129 casos positivos de coronavi­rus. Hay cinco hospitaliza­dos, uno de ellos en terapia intensiva. En total suman seis fallecidos.