La médica epidemió­loga paraguaya Belén Ramírez regresó al país para brindar sus servi­cios al Ministerio de Salud Pública y así evitar una mayor propagación del coro­navirus entre la población. Ella cuenta con 10 años de experiencia en la Organiza­ción Médica Humanitaria Internacional y en Médicos sin Fronteras.

“En epidemias como estas, siempre hay que preparar­nos para lo peor y agradecer si no llegamos a eso. El peor escenario es que no tengamos lugar en los hospitales, que no tengamos camas y que sigan llegando enfermos, como en Italia y España. Lo peor es que el personal médico se canse y ya no tome las medidas de bio­seguridad. El peor escenario es que todos se relajen y que vayan a compartir tereré y se saluden”, expresó Ramírez en contacto con el Canal GEN.

“Hay que preparar personal médico para las terapias y para operar los respiradores”, expuso para señalar que es fundamental que la gente no llegue a los hospitales y que se pueda interrumpir el conta­gio respetando la cuarentena.

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La profesional se encontraba brindando servicios en Sil­verado, California, Estados Unidos, desde donde regresó a Paraguay a raíz de la cri­sis desatada por el COVID-19. Señaló que cuenta con mucha experiencia en epi­demias en distintos países del mundo y manifestó que se debe actuar de forma inte­ligente con los recursos con que cuenta la cartera sani­taria y tratar de aumentar la realización de los tests.

“Hablé con los jefes y les dije ‘yo me voy a Paraguay’, desde la organización, como somos todos humanitarios internacionales, podemos estar en distintos países, pero yo sentí esa responsa­bilidad social, el corazón me llamó y yo sabía que tenía que estar en Paraguay”, expresó Ramírez.

La mujer resaltó las medi­das sanitarias dispuestas por el Ministerio de Salud en el país. Comentó que su trabajo este año se iba a centrar en países de África, como el Congo, debido a la epidemia del ébola. Sin embargo, el virus llegó al continente latinoameri­cano y motivó su traslado al país. “Empezaron a lle­gar los primeros pacientes (a Paraguay) y me tocó de entrada el Centro Médico Bautista, eso me tocó el corazón, porque yo soy resi­dente y desde ese momento supe que mi lugar era Para­guay”, afirmó Ramírez.

La profesional relató que el director de Vigilancia Sani­taria, Guillermo Sequera, la invitó a sumarse a los trabajos en Paraguay en el área de promoción de la salud. Su labor se centrará en implementar circuitos de protección en hospitales, lo que será de vital impor­tancia en la lucha contra el COVID-19.

La epidemióloga trabajó en distintos países como Sudán del Sur, Yemen, Colombia, República Centroafricana, Congo, Chad, Nigeria, Came­rún, México y Guatemala.

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