La pequeña hallada muerta en las inmediaciones de la Terminal de Ómnibus de Asunción (TOA) presentaba heridas en el cuello y en la cabeza, y de acuerdo al reporte de los forenses, la menor fue atada aún con vida y posteriormente falleció asfixiada por la posición fetal en la que la dejaron. El coordinador general de Panatología del Ministerio Público, Silvio Chiriff, explicó que la menor tuvo una muerte violenta y destacó que esto se pudo determinar pese al estado de putrefacción en el que la hallaron.
Reveló que la menor presentaba un traumatismo de cráneo y surcos a nivel del cuello, tras los cuales la niña continuó con vida. “La compresión mecánica en el cuello se hizo aún estando con vida, después fue atada y quedó en posición fetal, la cabeza sobre el tórax, más el traumatismo y la compresión, eso sí o sí le llevó a una asfixia”, comentó Chiriff en una comunicación radial. En cuanto a la posibilidad de que se haya producido un abuso sexual, el doctor aclaró que será muy difícil saber, debido a la avanzada descomposición del cadáver.
Al momento del hallazgo, la niña llevaba entre tres a cinco días de fallecida. No obstante, la data exacta y demás detalles solo podrán saberse con los resultados laboratoriales.
PIDEN JUSTICIA
Un grupo de ciudadanos se manifestaron el martes a la noche en las inmediaciones de la Terminal de Ómnibus de Asuncion y exigieron justicia para Francisca, la niña indígena de 12 años que fue asesinada, cuyo cuerpo fue encontrado el lunes en horas de la tarde-noche en un patio baldío por una vecina de la zona. La víctima pertenecía a la comunidad mbyá guaraní de la zona de Curuguaty, según los datos brindados por los familiares de la menor, información que maneja la Fiscalía. Una manifestante declaró a GEN que la zona carece de control policial, por lo que los niños/as y jóvenes nativos son explotados por adultos que se aprovechan de la vulnerabilidad en la que se encuentran. Recalcó además que hasta la fecha ningún representante del Indi se presentó en el lugar luego del lamentable hecho.
Organizaciones indigenistas reclamaron investigación y justicia para todos los casos registrados, además de Francisca, está el caso de Gumercinda Silva (23 de febrero del 2020), de la comunidad Vyapave, distrito de Azotey, departamento de Concepción. Fue hallada muerta y aunque se informó como suicidio, sus familiares no creen que haya sido un suicidio, sino un feminicidio.
Carolina Espínola (Viernes 21 de febrero del 2020), de 23 años, de la etnia guaraní, que sobrevivía de la venta de artesanía en los semáforos de las esquinas de la ciudad de Asunción, fue encontrada muerta en los fondos del Parque Caballero. Aunque se habló de suicidio, no se descartan otras causas.
Adolescente indígena (28 de enero 2020) fue encontrada maniatada y con signos de abuso sexual, en un local de una cervecería ubicada en Hernandarias, entre Estrella y Palma. Se le llamó al SEME, pero jamás llegó, según el relato del comisario, se le pudo llevar en la patrullera con presencia femenina. Se detuvo a una persona como responsable.
Embarazada y niña abusadas (30 de enero del 2020). Una mujer indígena embarazada y una niña de 11 años denunciaron haber sido víctimas de violencia sexual por parte de las autoridades comunitarias. El hecho ocurrió en la comunidad indígena Boquerón, de la localidad de Jorge Sebastián Miranda, ex Hugua Ñandu, del departamento de Concepción. Lleva el caso la fiscala Ondina Cabral. El autor fue detenido, pero las víctimas se encuentran amenazadas. Araceli Ramos Núñez (12/05/2019), de 35 años, indígena. Pedro Juan Caballero, departamento de Amambay. Fue hallada semidesnuda y con signos de haber sido abusada sexualmente y estrangulada con una cadenilla.