Más de 800 empleados no cobran su salario desde hace cuatro meses, y hasta que el intendente Armando Gómez no renuncie, continuarán con la medida de fuerza. Todo esto se suma a los G. 10.832.753.136 que la comuna no justifica al Ministerio de Hacienda. Fernando Báez, presidente de la Junta Municipal de Lambaré, expresó que la medida de fuerza continuará y los trabajadores siguen apostados en el tinglado de la comuna lambareña, situado detrás del edificio, ubicado sobre la Avda. Luis María Argaña y Cacique Lambaré.
“No se trata de cuatro meses, se trata de 120 días que no pueden alimentar a su familia, a causa de eso a algunos ya se les cortó la luz, el agua, los niños no van a la escuela porque no tienen los padres para enviarles, ni para darles para su recreo. Algunos ya desalquilaron su casa y están viviendo en la casa de otros compañeros. Esto se torna caótico y el intendente no da un paso al costado y por todos lados dice que no va a renunciar”, exclamó.
Los sindicatos seguirán con las manifestaciones hasta tanto se les pague los haberes atrasados desde hace cuatro meses más los 10 meses en torno a beneficios sociales: seguro médico y el plus por antigüedad. Agregó que la ciudadanía apoya a los funcionarios, les llevan empanadas, colchones, agua, de manera a que puedan resistir. Entre otras denuncias, alegan que hubo más de 200 despidos injustificados, mientras el intendente supuestamente gastó casi G. 1.000 millones en un festejo familiar.
“Se volvió a reiterar el pedido de renuncia del intendente municipal, pedimos nuevamente aprobar la Resolución 3.773. También hoy se rechazó el proyecto de convenio con la Caja de Jubilaciones, y también se aprobó por medio de una minuta de todos los concejales que un plazo de 48 horas pague el salario a todos los funcionarios municipales”, expuso el edil. Vale recordar que tras la presión, el director administrativo presentó su renuncia, y el intendente aún así no dimite. La Nación intentó comunicarse con el jefe comunal para tener su versión y éste no responde ni atiende llamadas.