En el Paraguay se registran 9 casos por día de supuesto abuso sexual en niños, niñas y adolescentes, según manifestó la fiscala Carina Sánchez, agente delegada de la Unidad Especializada de Lucha contra la Trata de Personas y Explotación Sexual de Niños, Niñas y Adolescentes. En el 2018, la cifra ascendió a 2.608 supuestos abusos.
Las constantes campañas de sensibilización emprendidas desde las distintas organizaciones –gubernamentales y oenegés– logra visibilizar cada vez más los casos de abuso sexual en niños, niñas y adolescentes. Es así que mensualmente llegan a las oficinas del Ministerio Público 280 casos de denuncias, y de enero a agosto de este año suman 2032 supuestos abusos en niños y niñas, explica la agente fiscal.
La mayoría de los casos de abuso son de mucho tiempo, debido a que el victimario “prepara” a la víctima, induciendo a desarrollar el deseo. Se estima que el 90% de los casos sucede en el ámbito familiar o en el entorno cercano.
Justamente las campañas tienen por objetivo desnaturalizar la violencia y los abusos sexuales, que muchas veces los niños sobrellevan en silencio ya que reciben amenazas, o en todo caso son inducidos a realizar esos actos, hasta que finalmente deciden contar a una persona de confianza y estos realizan la denuncia.
Los casos de abuso no solo suceden de parte de una persona adulta a un chico, ya que también existen casos de niños que fuerzan a los más pequeños. Sin embargo, estos casos no son llevados por la Fiscalía, ya que reciben otro tratamiento en vista que los chicos hasta los 13 años no pueden ser imputados por ningún hecho penal.
Mediante la modificación al artículo 135 de la Ley 1160/97, la tentativa de abuso en niños (hasta 13 años) recibe un castigo similar a un hecho consumado, cuya expectativa de pena va de 10 a 15 años en caso de manoseos y de 15 a 20 años con los agravantes. En caso de consumar el hecho y si la víctima es un niño o niña menor de 10 años, la pena no puede ser menor de 20 años de prisión, explicó la fiscala.