Uno de los aviones hidrantes provenientes de la Argentina, que estaba trabajando para sofocar el fuego en el Chaco paraguayo, tuvo desperfectos mecánicos en el momento del aterrizaje y no pudo volver a levantar vuelo. El impasse ocurrió ayer en la estancia Pensilvania, situada en la localidad de Fuerte Olimpo.

Si bien la aeronave tuvo un percance, el piloto resultó ileso. La situación ya fue notificada a la Dirección Nacional de Aeronáutica Civil (Dinac) y también a la Embajada de Argentina, según explicó el ministro de la Secretaría de Emergencia Nacional (SEN), Joaquín Roa.

“Un avión de matrícula argentina tuvo problemas con el aterrizaje, en la estancia Pensilvania. Ya se le comunicó al embajador y a la Dinac, el piloto está bien, no sufrió ningún tipo de daño”, explicó en comunicación con la radio 1020 AM.

El fuego en la Región Occidental no da tregua, ya que en algunos lugares se logra controlar las llamas, pero se generan nuevos focos. Para extinguir el siniestro, actualmente trabajan 11 aviones con la Cuarta División de Infantería sobre un incendio en Cañaveral. La situación está medianamente controlada gracias a que hay abastecimiento de agua en las cercanías, informó.