La inversión promedio, en Sudamérica, llega apenas al 2,1% del presupuesto de salud en los países, este, aparte de escaso, está mal utilizado, porque se dirige a hospitales psiquiátricos en vez de dirigir intervenciones y presupuesto hacia la comunidad, basados en la atención comunitaria a la salud mental”, expresó el doctor Andrea Bruni, asesor en Salud Mental y Uso de Substancias de la Organización Panamericana de la Salud/Organización Mundial de la salud (OPS/OMS) en su visita a Paraguay la semana pasada para trabajar en el “Plan de Salud Mental”.
El especialista destacó que, por un lado, el reto en salud mental es instalar el tema como prioridad dentro de la agenda de salud pública, y por otro, reorientar la inversión destinada, más aún porque en Paraguay los recursos para este sector son bajos, de solo 1,84% del presupuesto de salud.
Bruni participó como panelista de la reunión especializada “Perspectiva regional sobre el rol del Poder Judicial respecto del derecho a la salud” y expuso sobre los desafíos actuales en materia de derecho a la salud. Igualmente, su trabajo en Paraguay se enmarca en la Reforma del Sistema de Salud Mental, que el Ministerio de Salud encamina con la cooperación técnica de la OPS/OMS.
De acuerdo con sus expresiones, se busca dar un giro en la manera de encarar la problemática. Actualmente, en Paraguay los servicios de salud mental son muy limitados, se concentran en el hospital psiquiátrico y no responden a la necesidad de la población.
TRES PILARES
Bruni apunta a tres pilares de implementación. El primero de ellos incluye centros de salud mental comunitarios de tipo ambulatorios; en segundo término, la creación de Unidades de Salud Mental en los hospitales generales del país, que puedan dar cobertura a episodios breves, con periodos cortos de internación; y como tercer eje, trabajar la salud mental en atención primaria no especializada. Es decir, trabajar con médicos generales, enfermeros. “Es importante fortalecer y establecer servicios comunitarios donde las personas puedan tener acceso a los servicios de salud mental y se puedan proteger sus derechos”, dijo.