“Todavía no entiendo, el agresor es de Mariscal Estigarribia, como nosotros, compueblanos, seguramente tiene algún problema psicológico, todavía no puedo entender”, contó Nelson Enciso, padre de uno de los cadetes brutalmente agredidos en las plantas de los pies por el cadete Barreto, de 3er año, en el Liceo Militar Acosta Ñu.
Su hijo Lucas fue muy golpeado y presenta hematomas y según relató, “entiendo que es la primera vez que le ocurrió a mi hijo, que está yendo en el 2º año. Él tampoco me pudo explicar, ni el mismo sabe, aunque parece que los viene persiguiendo desde el primer año a los de Mariscal Estigarribia”. De acuerdo a María Elena Prieto, madre de otro de los cadetes golpeados, sería una práctica habitual denominada “jueves florido”. Abogado de oficio, Enciso dijo que “como todo padre, me molestó bastante, no me sentí impotente, porque tengo confianza en que se le va a sancionar al cadete agresor. Dejo en manos de la justicia militar, hablé con el comandante del cuerpo de cadetes y me garantizó que no iba a quedar impune, así que estoy expectante del resultado”, comentó todavía dolido.
Según anticipó, el joven seguirá en el Liceo. “‘Claro que voy a seguir, es un pequeño tropiezo’, me dijo, le gusta la carrera militar, ya sufrió luego mucho, no es fácil el primer año, así que ya pasó todo lo más difícil del Liceo Militar”, contó el hombre y agregó que siempre vio alegre y contento de pertenecer a la institución a su hijo.
INVESTIGACIÓN
El Ejército informó que el Juzgado de Instrucción de turno de la Corte Suprema de Justicia y sus propios cuadros intervinieron en el caso de los tres cadetes del segundo año del Liceo Militar “Acosta Ñu” (Licemil) de Ytororó que sufrieron lesiones en las plantas de los pies al ser golpeados por un cadete del tercer año.
El comunicado, quizá por un purismo jurídico, menciona que la fuerza trasladó a “las supuestas víctimas hasta el Hospital Militar Central, a fin de ser inspeccionadas”, cuando consta en fotos y en los diagnósticos médicos la brutalidad de los golpes.