“En ningún momento atro­pelléa nadie, solo desvié la barrera por­que no tenía la habilitación. Yo desvié una barrera”, ase­guró a los mediosde prensa David Demestri tras perma­necer encerrado por más de 10 horas en una habitación de un motel en San Lorenzo, luego de atropellar y dejar con lesiones al agente de la Patru­llaCaminera Ángel Manuel Vargas Obregón (22), quien le hizo la señal de parar a fin de realizar los controles ruti­narios de cada fin de semana.

El suceso ocurrió ayer en horas de la madrugada sobre la Avda. Mariscal López, en las inmediaciones de la Uni­versidad Nacional de Asun­ción, y se cree que Demestri condujo en estado de ebrie­dad, por lo que no quiso que­darse para el control.

Luego de “desviar” la barrera yatropellar al uniformado, Demestri se dio a la fuga y tras la persecución ingresó al motel Cascada, propiedad del futuro ministro de la Juven­tud, Felipe Salomón, hijo del senador colorado Óscar “Cachito” Salomón.

El hombre estaba al mando de un vehículo de la marca Hyundai, color blanco, con número de chapa EAD 255 –que alguna vez perteneció a la Fiscalía– e ibaacompa­ñado de Monserrat Kesler. A pesar de que el administra­dor de la casa de citas intentó convencer a la joven pareja de que salieran y se entregasen, no consiguió convencer almuchacho.

Para ese entonces, la Fiscalía ya obtuvo la orden de allana­miento y una comitiva poli­cial-judicial ingresó al motel y procedió al arresto de los implicados.

Ambos quedaron a disposición del Ministerio Público y tras su detención, se procedió a la declaración indagatoria. No obstante, podrían ser impu­tados: Demestri por tentativa de homicidio doloso y Kesler en calidad de cómplice, según manifestó el fiscal Gerardo Mosqueira, quiensolicitará prisión preventiva para ambos implicados en el hecho.

Debido a la excesiva demora para realizar el procedi­miento de detención de los implicados en el hecho, el fiscal Mosqueira sería objeto de un sumario, según infor­maron desde la Dirección de Comunicaciones del Ministe­rio Público.

Se presume que el senador Óscar Salomón o su hijo, el futuro ministro de la Juventud, Felipe Salo­món, habrían tenido injeren­cia para evitar que la comitiva ingrese, por lo que se debió esperar 10 horas para el pro­cedimiento respectivo.