Un supuesto líder del Primer Comando Capital (PCC) fue detenido ayer en Asunción, durante un procedimiento encabezado por la Fiscalía y la Secretaría Nacional Antidrogas (Senad). El hombre sería el encargado de coordinar las operaciones del grupo entre Paraguay y Bolivia y uno de los más buscados en Brasil.
Se trata de Eduardo Aparecido de Almeida (39), alías “Piska”, quien sería jefe y segundo en línea de jerarquía del PCC. El hombre cuenta con al menos cuatro sentencias por cumplir y seis órdenes de captura en Brasil por varios crímenes relacionados al tráfico de drogas, armas, asociación criminal, secuestros y homicidios.
El allanamiento se produjo en una lujosa vivienda ubicada sobre la calle Austria, entre Viena y Bélgica, cerca de la Contraloría General de la República. La vivienda pertenecería al conocido futbolista argentino Roberto Nanni.
La fiscala general del Estado, Sandra Quiñónez, celebró el éxito del operativo e indicó que el detenido vino a nuestro país para establecer conexiones entre Bolivia y Paraguay. Por su parte, la fiscala del caso, Lorena Ledesma, señaló que el detenido es el líder de la célula “Raio X”, del grupo criminal PCC, buscado por la justicia brasileña por varios crímenes.
DETENIDOS Y EVIDENCIAS
Igualmente, fueron detenidos un oficial segundo de la Policía Nacional, Carlos Mendoza, y el ciudadano brasileño Ricardo Moraes, identidad que sería falsa. El efectivo policial habría sido contratado como seguridad del líder del PCC, ademas, se encargaba de proveerle documentaciones para desplazarse sin inconvenientes.
Hugo Ibarra, ministro de la Senad, señaló que Eduardo Aparecido de Almeida, alias “Piska”, intentó huir cuando se dio cuenta que los agentes de la Senad y de la Fiscalía estaban ingresando. “La vivienda estaba muy bien resguardada, con cámaras de seguridad. Él no sabía que estaba rodeada y al trepar una muralla se lesionó un brazo”, precisó.
Francisco Ayala, director de Comunicaciones de la Senad, agregó que Almeida, quien fue nombrado recientemente como coordinador regional de Paraguay y Bolivia, llegó a nuestro país tres meses atrás, según informaciones de la Policía Federal de Brasil. Desde Migraciones manifestaron no haber registrado su ingreso, por lo que habría entrado con una identidad falsa.
En el lugar se encontraron varios vehículos de alta gama, de la marca Mercedes-Benz y Kia, motocicletas de la marca Ducati y Honda, todos con chapa paraguaya y a nombre del oficial de Policía. Además, US$ 102 mil y G. 5 millones en efectivo. Evidencias que fueron incautadas.
EXPULSADOS A BRASIL
Fuentes indicaron que “Piska”, al igual que el otro ciudadano brasileño, iban a ser trasladados a Ciudad del Este para su expulsión y entrega a las autoridades brasileñas.Ayer en horas de la noche se habría efectivizado la expulsión de los mismos.