Con los deseos más simples que los de un niño, pero con el fervor y la ilusión aún más grande que cualquiera, los abuelitos del Hogar de Ancianos San Francisco de Asís también esperan la llegada del día mágico en el que se cumplen los pedidos y llegan los regalos.

A pesar de que por las redes sociales ayer recorrían imágenes de años anteriores en las que se veían a los ancianos anotando sus pedidos para los Magos de Oriente –y que mereció una aclaración del Consejo Directivo de la fundación–, la realidad no cambia mucho. Ellos están allí, casi abandonados y como todos los niños que viven escondidos en el cuerpo adolorido de un viejito, cada uno de los residentes del hogar realizó su pedido.

"Marga", como es conocida Margarita de Jesús Melgarejo, es una nena de 62 años que hace 7 mora en ese lugar. Ella confiesa que le gustaría que los reyes le trajeran un rosario de la Divina Misericordia. Y es que "Marga" es una chica buena, demasiado religiosa, a tal punto que nunca se casó ni tuvo hijos. Siempre se dedicó a la espiritualidad y a rezarle a Dios.

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Sus compinches que son traviesos también escriben sus pedidos en la pizarra. Pablo no puede con su genio y solicita un par de zapatillas y con ilusión espera que los reyes tengan en sus alforjas unos cigarros para despuntar el vicio. A su lado, Ángel espera su turno para formular el pedido. Tampoco puede con su genio y como un niño grande lo primero que le sale es "un kepis y una remera de Cerro", el club de toda su vida.

Para quienes quieran hacer realidad el pedido de estos chicos, pueden llamar a los números (0983) 260-646 y (0983) 627-557.

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