Organizada por el colectivo de mujeres artistas Sinergia, en el marco de la exposición “Arte Femenino, en diálogo con la memoria urbana.”, este miércoles 20 de agosto se desarrollará una charla abierta con la ilustradora invitada Regina Rivas, integrante de la colectiva de arte paraguayo Robusta.
La actividad tendrá lugar desde las 18:30 en el Espacio Cultural Staudt (Iturbe 333 c/ Mcal. Estigarribia), sede de la Secretaría Nacional de Cultura, con entrada libre y gratuita.
Conversación sobre ilustración
Bajo el título “Ilustrar en Paraguay: entre imágenes, géneros y relatos”, la propuesta abre un espacio de diálogo sobre el lugar de la ilustración en la escena cultural paraguaya y los relatos visuales que emergen de la práctica artística.
El público podrá interactuar con la artista en una ronda de preguntas y reflexiones compartidas. Así también, la ilustradora compartirá con los participantes, sus creaciones, que estarán exhibidas.
Sobre Regina Rivas
Regina Rivas nació en Asunción en 1982. Desde temprana edad encontró en el dibujo una forma de expresión, que con el tiempo se consolidó como su oficio y pasión. Estudió Diseño Industrial y a partir de allí se acercó a la serigrafía y al mundo de la ilustración, que hoy forma parte esencial de su vida y producción artística.
- Participó en exposiciones colectivas en:
- Asunción
- São Paulo
- México
- Bogotá
- y combina su labor como ilustradora independiente con proyectos personales.
Fue docente del Instituto Superior de Arte Olga Blinder y actualmente integra la colectiva Robusta, un espacio que impulsa y visibiliza el trabajo de las artistas paraguayas.
Cita imperdible
La charla es una oportunidad para acercarse al proceso creativo de una ilustradora que ha convertido el dibujo en un puente entre historias, géneros y memorias.
Dejanos tu comentario
Reinauguración del edificio Staudt, nueva sede de la SNC
El señorial edificio Staudt, un inmueble con una rica historia vinculada al desarrollo urbano y comercial del centro histórico asunceno, luce hoy todo su esplendor para albergar la sede central de la Secretaría Nacional de Cultura, y convertirse en un escenario estratégico para la difusión de actividades artísticas, formativas y patrimoniales. Celebrando la renovación del edificio y la presentación de su nuevo perfil con vocación pública, este emblemático recinto ubicado en Iturbe 333 esquina Mariscal Estigarribia fue escenario de un evento radiante. El mismo contó con la participación especial del presidente de República, Santiago Peña, y de la primera dama, Leticia Ocampos, quienes junto con la anfitriona de la noche, la ministra de la SNC, Adriana Ortiz Semidei, desataron la cinta tricolor inaugural, marcando la apertura oficial del elegante palacete cuyo origen se remonta a los años finales del siglo XIX.
“Este edificio, una verdadera joya arquitectónica de nuestra querida ciudad de Asunción, renace transformándose en el nuevo hogar de la Secretaría Nacional de Cultura y, lo que es más importante aún, es un espacio vivo para todos los paraguayos”, dijo el presidente Peña. “Representa mucho más que la rehabilitación de un patrimonio, es un paso decidido en un ambicioso plan de revitalización del centro histórico de Asunción. Simboliza perfectamente lo que buscamos como nación, preservar nuestras raíces mientras construimos un Paraguay moderno y vibrante”, subrayó el mandatario.
NUEVO HITO
Antes, la ministra Ortiz Semidei expresó que el 23 de abril no constituye solamente una fecha emblemática para el arte y la cultura, sino que tiene una significación especial por tratarse del Día Internacional del Libro y de los Derechos de Autor. “Celebramos un nuevo hito en la historia de la institucionalidad de la República del Paraguay”, enfatizó. “Hoy, la Secretaría Nacional de Cultura renace, emprendemos un cambio hacia la modernización institucional con la firme convicción de posicionar la cultura en el lugar que se merece, en el caracú de nuestras políticas públicas, en el centro de las prioridades de nuestro país”, añadió.
En el contexto del Día del Libro, el periodista y escritor Alcibiades González Delvalle fue distinguido esa noche con el premio Carlos Colombino, por su relevante e invaluable aporte a la cultura nacional. El evento contó con la vibrante presentación de la Orquesta Nacional de Música Popular (Onamp) dirigido por el maestro Luis Álvarez. Hubo un brindis con bocaditos típicos y tragos preparados con productos de Cañas Paraguayas SA.
Dejanos tu comentario
La Gran Feria Robusta prepara una cargada jornada de arte
La Colectiva Robusta llevará a cabo su evento más grande del año, la Gran Feria Robusta, el sábado 14 de diciembre, en horario de 11:00 a 21:00, con acceso gratuito en Club Touch, sito en avenida España 1272, en el Paseo Carmelitas. Será una jornada en la que el público podrá disfrutar de una experiencia fresca con diversas actividades artísticas, y así también conectar y conocer a las artistas de la colectiva y sus trabajos.
La feria anterior sorprendió a la colectiva con una masiva respuesta de la comunidad, reuniendo a aproximadamente 700 personas. Si bien Robusta es una colectiva joven, con el paso del tiempo y ferias anteriores, se convirtió en una plataforma dinámica para conectar artistas y público, en un ambiente inclusivo, divertido y vibrante.
“Entre las Robustas nos gusta decir que nuestra feria es como una ‘guardería de grandes e infancias’, ya que vemos a personas de todas las edades, dibujando, pintando las paredes, comprándose calcos, cuadritos y un montón de cosas con ilustraciones que se van convirtiendo en tesoros porque es algo que no podés comprar en el súper, son hechos y envueltos a mano con un amor a nuestro laburo que se nota”, comentaron las Robustas.
Este año, la feria contará con una programación especial llena de actividades interactivas, con el objetivo de convertirse no solo en un lugar para comprar arte, sino para vivirlo; como: mesas de dibujo, mesas de collage, cuadros colaborativos y una habitación completa para pintar, donde los asistentes podrán liberar su creatividad. También habrá música, tragos y comida para que todos puedan disfrutar de una jornada diferente. El espacio estará climatizado y equipado con ventiladores con agua.
En la feria estarán disponibles los trabajos de 20 artistas de Robusta, junto a invitadas especiales como Trama Colectiva, Contratapa Libros, Laura Mandelik, entre otras. “Robusta es más que una feria, es una experiencia de arte, no se trata solo de vender nuestros productos sino de habilitar un nuevo espacio donde las personas se puedan divertir, expresar y conectarse con el artista que todos llevamos dentro y solo quiere salir a jugar un rato”, señala Mali Jara, directora de la colectiva.
Lea más: Club de literatura coreana cerró el año con ocho exitosas sesiones
Trabajo en equipo
Un grupo de 33 mujeres ilustradoras paraguayas con diversos estilos y voces. Desde Robusta, muestran la belleza de un grupo de mujeres divergentes, que, a través del arte, apuntan a crecer como colectiva para una comunidad cada día más robusta. Uno de los valores claves de Robusta radica en su enfoque colectivo. Más que una simple agrupación de artistas, es una red de apoyo y colaboración donde cada persona puede compartir su experiencia y conocimientos.
“Somos una red de información, donde nos ayudamos y nos fortalecemos. Somos diversas, pero nos une el amor por el arte y el deseo de crecer juntas”, comenta Mali Jara. La GFR cuenta con el apoyo de: Ministerio de Cultura, Tedic, Fernet Branca, Maikena, Hana Serigrafía, Centro de Documentación y Estudios (CDE), Blue Moon, Uptown, Amnistía Internacional, Texciclo, Nescafé, Copipunto, Copel, Uniflex, Dove, Bemo Taller, La Floresta, Don Helado.
Mali Jara
Humana, redactora, dibujante, creadora del personaje Anita Dice y directora de la Colectiva Robusta. Es la primera paraguaya en publicar un libro de humor gráfico en Argentina con la editorial Chirimbote, llamado “Mi oveja favorita”. El humor es mi superhéroe favorito. Estudié periodismo, pero terminé dedicándome al humor gráfico, que sin duda es un tipo de periodismo. Estoy enamorada de las ideas y los textos, y prefiero conocer a él o la guionista de una peli que, a su protagonista, a no ser que sea Jane Fonda o Kate Mckinnon.
Regina Rivas
Nació en Asunción, Paraguay en 1982. Dibuja desde que tiene memoria y se inspira en lo cotidiano, en las preguntas que nos hacemos todos los días, las curiosidades del mundo, los animales, las plantas y el inmenso mundo que gira alrededor de las mujeres.
Lea también: Identidad en pasarela: estudiantes diseñaron una fusión de moda y cultura
Bianca Fernández
Artista visual de vocación, y diseñadora gráfica especializada en ilustración digital de profesión. Directora de arte de la Colectiva Robusta, la primera asociación de ilustradoras del país. Imparte talleres y charlas sobre el color en el mundo visual, la ilustración narrativa y la pintura. Se enfoca en la consciencia y el autoconocimiento tratando de reflejar la belleza de la humanidad dentro de lo ordinario y el misticismo en la naturaleza.
Trama
Colectivo de alfareras tejidas horizontalmente por el común oficio de moldear el barro en expresiones atemporales. Comprometidas con el aprendizaje, el intercambio de conocimientos, la preservación y el cuidado tanto del entorno como de sus cuerpos, buscan colectivizarse ante la necesidad de crear modos alternativos para poder sustentar el oficio y compartir la carga y el esfuerzo del trabajo individual.
Les une además la urgencia de mantener vivo el legado de los que vinieron antes y desarrollaron las tecnologías con las que hoy trabajan, para poder expandirse de manera consciente hacia otras realidades. Transitan la práctica alfarera como un acto político, utilizando su arte para comunicar, para reclamar, para resistir, para celebrar. El oficio es su forma de estar y transitar este mundo, también es su refugio. El colectivo está formado por las alfareras: Gisela Reneiro, Leila Buffa, Virginia Barberis, Verónica Fernández, Ayelén Van Humbeeck, Valentina Coscia y María Paz González.
Dejanos tu comentario
Vero Sforza: retratar el jazz
A sus 27 años, esta ilustradora paraguaya encontró en la pintura y en la música una nueva forma de hacer arte: dibujar rostros de artistas del género a partir de una mancha.
Por: Micaela Cattáneo
Fotos: Gentileza
La encontré escribiendo sobre las hojas vacías de un libro que ocupaba parte de la mesa donde estaba sentada, en un clásico bar del centro de Asunción. "Es un cuaderno de Joan Cornellà, un ilustrador español súperbizzarro que me gusta mucho", me aclaró, dispuesta a continuar con la taza de café que había pedido.
Vero (27) es una ilustradora paraguaya que hace retratos de músicos de jazz a partir de una mancha de pintura. Su primer encuentro con el género fue en Buenos Aires, Argentina, a los 17 años, cuando fue a estudiar dibujo y pintura en el Instituto Universitario Nacional de Arte (IUNA).
"En Argentina hay jazz por todos lados. Por primera vez, vi músicos del género tocando en vivo y fue increíble porque eso modificó la manera de encarar mis dibujos", recuerda la artista, en medio de la charla.
Su historia con el trazado, los pinceles y la pintura inició en plena etapa de dibujos animados y juegos al aire libre. "A los ocho años", recuerda. "Hacía paisajismo. A esa edad empecé a estudiar pintura con Porfirio Bustos. Pero el dibujo siempre lo hice de forma autodidacta hasta los 17 años, cuando fui a tomar cursos a Buenos Aires".
En su infancia, de alguna u otra forma, el arte estuvo presente, y eso gracias al talento que veía en su padre. "Papá siempre dibujó. Y el interés por la música, en parte, también viene de la influencia que recibí de él; de lo que escuchaba, porque se dedicaba a la danza contemporánea", rememora.
A la par que tomaba clases de dibujo y pintura en el vecino país, iba a las prácticas de bajo en el conservatorio de la universidad. "Ahí escuchaba mucho jazz, pero tocaba tango todo el tiempo porque me encantaba", comenta.
Si bien nunca se presentó de manera profesional como músico de jazz, asegura que lo improvisado del estilo la ayudó a definir un sello propio en sus obras de arte. "Estoy tratando de que al dibujar rostros de artistas de jazz pueda ser tan libre como lo que ellos tocan", destaca.
Entre tintas y papeles
Es la primera vez que Vero se encuentra en la búsqueda de un taller propio. "Como viví en muchas partes, nunca tuve un lugar fijo donde dibujar y pintar. Si bien trabajé mis obras en espacios donde se hace arte, nunca fui la dueña de esos lugares. Pero me acostumbré y creo que es parte de la esencia de lo que hago", indica.
Al momento de crear, no hay técnicas establecidas, porque al igual que en el jazz, deja fluir sus ideas con plena libertad. "Las ilustraciones nacen de una mancha. ¿Cómo es eso? Agarro varias cartulinas, las coloco en el piso, tomo un pincel y, directamente, desde el tarro voy salpicándolas con pintura. Cuando se secan, elijo las manchas que más me gustan y las uno con los rostros que venía pensando", explica sobre su método.
La relación entre sus hábitos artísticos y la escena del jazz es tan fuerte, que se percibe hasta en las comparaciones más sencillas. "Existe un ciclo de jazz donde se presenta un músico durante todo el mes. Yo puedo ir a todos sus conciertos, pero ninguno va a ser igual al otro. En cada improvisación hay una nueva expresión o idea", resalta. Y prosigue: "Me pasa lo mismo con los retratos. Si bien puedo estar dibujando el mismo rostro siempre, nunca va a ser igual. Y es ahí donde la libertad artística es sagrada. Creo que el arte debe vestirse de distintas formas, siempre y cuando sea real".
Inspiración de calle
Vero fue la artista que dio vida a los rostros de algunos referentes de jazz ubicados en los murales de bares como Mburucujazz y Drácena, sitios que promueven conciertos vinculados al género, en Asunción. "Es como un aporte que hice a la escena del jazz local. Más de una vez me dijeron: 'Qué bien se siente tocar acá y mirar la imagen de Herbie Hancock, Esperanza Spalding o John Coltrane'", cuenta.
Su desafío con el jazz, además de que la siga inspirando a la hora de crear, es el de poder improvisar como los grandes músicos con su bajo. Mientras tanto, se prepara con el instrumento para presentarse como parte del Ensamble Pu Rory, que está bajo la dirección de Berta Rojas. "Audicioné este año y quedé", agrega.
Su voz tímida no le saca fuerza a su discurso: "El jazz te vuela la cabeza", sostiene y, paradójicamente, es la expresión que la mantiene con los pies firmes sobre la tierra. "Conocí el jazz caminando por Buenos Aires, y es desde ese lado humilde del género o desde esa cultura de calle con la que siempre me quiero identificar".