La Policía Nacional desplegó agentes para resguardar la vivienda de la familia del joven sindicado como asesino de María Fernanda Benítez en Coronel Oviedo, tras la irrupción de vecinos que indignados por el crimen intentaron quemar la residencia.
Los policías están apostados frente a la “casa del horror” donde la víctima habría sido mantenida en secreto hasta el día de su violenta muerte, cuya causa principal aún sigue en investigación por los forenses.
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Los manifestantes lograron derribar el portón de la vivienda y tras ingresar al predio prendieron fuego a algunos muebles, aunque posteriormente el incendio pudo ser controlado. La fuerza policial se vio sobrepasada por la gente que se autoconvocó ayer en el sitio con el firme objetivo de destruir todas las pertenencias de la familia del sospechoso.
En cuanto a la investigación fiscal, el día de ayer se efectuaron dos allanamientos: uno en la casa de la amiga y presunta cómplice del feminicida. Se trata de Mikahella Chiara Yasy Rolón Melgarejo, estudiante de Medicina, quien mantenía una fluida comunicación con el adolescente para gestar el asesinato de María Fernanda, según las pericias.
Además los investigadores llegaron hasta una farmacia donde aparentemente se habría adquirido el medicamento para provocarle el aborto a la joven que cursaba un embarazo de más de tres meses.
Los ciudadanos ovetenses están indignados y no paran las manifestaciones para exigir justicia para la familia de la asesinada. La extensa propiedad del agente penitenciario y su esposa, una docente, permanece fuertemente custodiada por efectivos policiales para evitar nuevos ataques de los manifestantes.
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