El médico forense Pablo Lemir dio una explicación científica sobre el insólito caso de una recién nacida prematura que fue declarada fallecida en el Hospital Regional de Ciudad del Este, pero que sorprendió a sus familiares al moverse en pleno velatorio, a solo media hora del entierro. Dijo que el caso podría ser diagnosticado como catalepsia, un estado de aparente muerte y sin signos vitales.

“Estamos hablando de casos sumamente raros, la catalepsia no es un fenómeno frecuente, pero dentro de su infrecuencia es más posible que se presente en adultos o en niños ya grandes”, dijo a la 1080 AM. Aseveró que aún no se conoce a ciencia cierta cuál es el fenómeno que genera la catalepsia. “Se define como un estado en donde por algún trastorno neurológico vegetativo el cuerpo tiene todos los signos de una muerte aparente”, refirió.

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El forense explicó que no se detectan latidos cardíacos ni frecuencia respiratoria, ya que el cuerpo está inmóvil, yace en una cama sin ningún signo. “Y esto es más frecuente en algunos casos de esquizofrenia, en algunos casos de enfermedad de Parkinson o en algunos casos con abuso de sustancias”, indicó.

Puntualizó que el cuadro clínico no es propio de un neonato. “Hay que tener en cuenta que en los lactantes se puede presentar un cuadro que se llamaba anteriormente estado de muerte aparente, actualmente se conoce como BRUE (evento breve, resuelto, inexplicable; por sus siglas en inglés) donde un bebé presenta signos de muerte aparente, sin latidos cardíacos, sin frecuencia respiratoria”, indicó.

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Según el experto en medicina forense, el recién nacido se puede presentar como cianótico (azul), morado o con una palidez de muerte. “Obviamente se le ausculta, no hay frecuencia respiratoria, no hay latidos cardíacos y se declara la muerte. Y es un fenómeno que luego revierte. También es extremadamente raro cómo pasa con la catalepsia. Es la definición que se da normalmente en lactantes”, acotó.

Lemir consideró que el caso del bebé que “revivió” en Ciudad del Este es aún más peculiar habida cuenta que su alumbramiento se produjo con tan solo 26 semanas de gestación y un cuadro de prematuridad extrema.