En la iglesia María Auxiliadora del km 20 de la Ruta PY02, de Minga Guazú, se celebraba una misa ayer a las 18:00. Grande fue la sorpresa cuando al término del oficio religioso se dieron cuenta de que desconocidos ingresaron a las habitaciones y robaron un total de G. 25 millones y objetos varios como un equipo de sonido. Fue víctima el sacerdote Sergio Maciel Ocampos (49), quien era el que oficiaba.

Es lo que informó la Comisaría 8ª de Minga Guazú, cuyo personal acudió hasta el lugar del hecho y recibió el reporte del cura párroco Maciel Ocampos. Relató que después de la celebración religiosa fue hasta el sector de habitaciones, en la parte trasera del templo, y encontró la puerta de su pieza forzada y sus pertenencias esparcidas por el piso.

Asimismo, dijo que no encontró la cajuela, marca Kyodoled, que contenía el dinero y estaba cerrado con llave, además de una notebook, marca Acer, de 19 pulgadas. También llevaron un equipo de sonido JBL, negro, una mochila Chenson, negro que contenía objetos personales del sacerdote.

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Luego constató que quienes ingresaron lo hicieron por la parte oscura del sector trasero de la iglesia, donde la reja de hierro fue violentada. La segunda víctima es el sacerdote Eduardo González, quien se encontraba de viaje cuando ocurrió el robo. De su habitación llevaron también dinero y una notebook. Entre las dos piezas, el dinero robado rondaría los G. 25 millones, según dijo el sacerdote Sergio Maciel Ocampos, al sitio La Jornada.

Personal de Investigación de Hechos Punibles a cargo del oficial inspector, Adán Vera y agentes de Criminalística, a cargo del suboficial segundo, Wilson Zeballos, intervinieron en el caso. Sospechan que quienes ingresaron a recorrer el lugar y encontrar las cajas donde estaban guardados el dinero, son gente que conocían bien el movimiento de la iglesia María Auxiliadora y las dependencias en el predio.

La comunidad salesiana prepara su fiesta patronal en honor a María Auxiliadora el 24 de mayo y todos los días se congrega mucha gente, con filas de vehículos en los alrededores. Parte del dinero sustraído es de la iglesia que estaba destinada para los gastos de la celebración.

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