Desde 1981, el Día Mundial de la Alimentación se conmemora cada 16 de octubre, en coincidencia con el día de fundación de la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO). Este año, el lema propuesto para la celebración es “No dejar a nadie atrás. Mejor producción, mejor nutrición, un mejor medio ambiente y una vida mejor”.

Esta fecha se recuerda el Día Nacional del Nutricionista, profesionales claves para guiarnos a llevar una alimentación nutritiva, fundamental para una vida sana, como también, piezas claves en un equipo multidisciplinario para guiar la alimentación de personas con patologías que necesitan un plan de alimentación especial como parte de su tratamiento de recuperación.

Considerando esto, el Instituto Nacional de Alimentación y Nutrición (INAN) presentó los principales resultados del estudio “Perfil alimentario nutricional y prácticas de estilo de vida saludable en escolares y adolescentes 2021-2022″.

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En dicho estudio, encontraron que cuatro de cada 10 escolares y adolescentes consumen menos de dos frutas al día. Por su parte, los que no las consumían diariamente, refirieron que es por falta de disponibilidad en la casa.

Mencionaron también que el estudio arrojó que el 90% consume comidas rápidas como hamburguesas, lomitos, empanadas, y embutidos (principalmente fiambres y chorizos). La mitad de los estudiantes ingiere estos alimentos con una frecuencia de uno a dos veces por semana.

Mientas que el 80,3% consume bebidas carbonatadas (gaseosas) convencionales, seguido por un 67,5% que bebe jugo natural con azúcar agregado y 55,1% leche chocolatada.

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Ante estos datos y teniendo en cuenta la situación epidemiológica actual, en relación con la obesidad y el sobrepeso, se insta a la población a adoptar una alimentación saludable. Desde el Ministerio de Salud refirieron que para lograrlo, un punto clave es que se produzca un cambio de hábito desde una temprana edad.

Esto se logra con acciones estratégicas intersectoriales como la promoción continua de los beneficios de la alimentación saludable durante todo el ciclo vital, el fomento de la producción local, la revalorización de las comidas hechas en la casa y, por otra parte, en nuestra sociedad ya industrializada también, promover que el consumidor conozca y/o identifique la información nutricional de un alimento envasado, a fin de realizar una elección efectiva.

Resaltaron que como país contamos con las Guías Alimentarias del Paraguay que orientan hacia la selección y consumo de alimentos saludables y variados que contribuyen al fortalecimiento de la seguridad alimentaria en la población sana, para prevenir enfermedades crónicas no transmisibles y la malnutrición por déficit o por exceso.

Además, recordaron que están en desarrollo las guías para escolares y adolescentes, que se complementarán con los materiales educativos de cantina escolar y recreo saludable.

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