El tercer año lectivo con la pandemia del COVID-19 arranca el 21 de febrero, con la particularidad que se retomará la modalidad presencial, pero tristemente, en muchas localidades del país, las clases serán impartidas nuevamente bajo los árboles. El principal desafío no será solo resolver el problema edilicio de las instituciones educativas, sino enfocarse en el plan de refuerzo de asignaturas claves, anunciado por el Ministerio de Educación y Ciencias (MEC). El 100% de las instituciones habilitan el retorno presencial.

Según el protocolo del Ministerio de Salud Pública, se exige el uso del tapabocas, higienes de manos y distanciamiento físico, pero para garantizar la educación de calidad en Paraguay, ¿es suficiente la presencialidad?

En entrevista realizada en el programa Fuego Cruzado, emitido por el canal GEN, la doctora en educación, Sofía Scheid, expresó que “la presencialidad en Paraguay es lo único que queda, por no haber desarrollado las infraestructuras necesarias para una educación digital competitiva. Las clases virtuales que teníamos eran de emergencia y tuvieron que durar apenas dos a tres meses, pero eso se hizo por dos años, consecuentemente el fracaso en esto nos acompañó y viene a endorsar el fracaso de largo tiempo”.

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Al respecto, sostuvo que a las brechas existentes en materia de ciencias básicas como matemáticas, ciencias y comunicación viene a sumarse una más que es la tecnológica.

“Todos los grandes cambios que se están dando en el mundo están estructurados por la tecnología y nosotros no podemos dar la espalda a que nuestros alumnos tengan que tener habilidades inmersas trasversales al manejo de la tecnología y a la producción de conocimientos dentro de ese contexto. La presencialidad sigue siendo muy importante para grandes aprendizajes tanto de socialización, pero vamos a una presencialidad total porque no se consiguió acá diseñar y desarrollar la educación que se viene y llegó al mundo”, refirió.

Agregó que la educación híbrida no obedece a lo que en este tiempo de pandemia se implementó en Paraguay. “La educación híbrida significa en aula, en la presencialidad, en línea, esto es todo un ecosistema digital para que ocurran los aprendizajes. Esto conlleva a que dicho sistema sea diseñado, ya que es una ingeniería para el aula, para la transformación educativa, por eso decimos que esta transformación en papeles que se plantea no va a impactar en absoluto en las mejoras de los procesos, al no ser que yo pueda escuchar que el Gobierno tome como prioridad reducir las brechas”, indicó.

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Para la profesional, los más perjudicados fueron los niños en edad escolar, en quienes se puede visualizar la falta de aprendizaje, mientras que el conflicto también se traslada para el grupo “que se encuentra saliendo al mercado, el segundo y tercero de la media” ya que tendrán varias debilidades.

“La prueba de ello son estos exámenes que ocurrieron en la Universidad Nacional, en donde vemos que los jóvenes no ingresaron porque se le da un cursillo de 2 meses para recuperar los 2 años ineficientes que tuvimos, necesitamos resolver la problemática de nuestra brecha educativa como eje de Estado”, indicó.

Paraguay en riesgo de quedarse sin futuro

Según Scheid, Paraguay corre el riesgo de no “tener futuro” porque se vive actualmente la quinta revolución industrial que obedece principalmente a todo el conocimiento humano asociado a conocimientos de las máquinas.

“Esto quiere decir que todo lo que ocurrió en la pandemia del COVID nos dio luces hacia donde van las grandes transformaciones en la vida del ser humano. Si no se toma como pilar fundamental la educación en Paraguay estamos perdidos, acá desde hace 15 años que tenemos brechas y brechas y eso se fue quedando en la naturalidad y se está sacando chicos en el mercado incapaces de poder resolver las cuestiones laborales, ni siquiera para su propia vida”, detalló.

La educación debe ser la escalera del ascenso social

Aseguró que sin tecnología no será viable resolver la problemática educativa, ya que se necesita instalar conectividad en todo el país en tiempo y forma. “No se puede obviar la necesidad de una educación avanzada. Qué haremos con todos los jóvenes que desertaron, ellos serán parte de aquellos 265 mil nuevos pobres que tenemos hoy de la clase media. La educación tiene que convertirse de una vez por todas en la escalera del ascenso social”, manifestó.

Aboga por una transformación del Estado

Finalmente, la entrevistada dijo que ante la crisis sanitaria todos los países en el mundo lograron entender que la educación analógica murió, menos Paraguay. “Se debe hacer una transformación del Estado, para que la educación se transforme, yo no puedo acá transformar la educación dentro de un Estado como tal, se debe asumir que no solo le falta más dinero, sino un diseño competitivo, trabajar las habilidades en cadena. El objetivo del sistema educativo es el aprendizaje”, manifestó.

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