Aparte de la necesidad de sedantes para cuidados intensivos, como atracurio y midazolam, la situación crítica del sistema sanitario suma otro elemento en creciente demanda: el oxígeno medicinal. Las imágenes de la pandemia en otros países, como Perú, Ecuador o Brasil, urgiendo estos galones, comienzan ahora a darse también en los hospitales nacionales.
“La gran ventaja que tiene el Instituto de Previsión Social es que, por lo menos en sus hospitales de cabecera, instaló plantas de oxígeno”, manifestó Jorge Batista, gerente de Salud del Instituto de Previsión Social (IPS) en una nota al Canal 9. “Eso era algo que también mucha gente, en su momento, criticó como negociado, pero la planta de oxígeno es lo que está salvando vidas”, añadió.
Lea más: COVID-19: recomiendan postergar viajes no esenciales al exterior por avance de la pandemia
“Esa planta de oxígeno también se generó la producción, pero para patologías estándar. Nos enfrentamos a una patología (por el COVID-19) que requiere principalmente oxígeno cien veces más que lo que requiere una cirugía o una neumonía normal”, señaló Batista. “Nosotros usamos el oxígeno, les voy a dar un promedio, más o menos, entre 5 y 10 litros por minuto. Hoy día (debido al coronavirus) están usando entre 70 y 80, hasta 90 litros por minuto. Entonces, también es un producto finito”.
De acuerdo a un proveedor, la demanda de los galones de oxígeno medicinal se disparó de un promedio de 5 por semana a 5 por día. La opción de alquiler permite acceder a un galón a partir de G. 500.000, que incluye la carga, el equipo completo, entrega a domicilio, accesorios desechables y se garantiza el servicio las 24 horas.
Lea más: Sé protagonista de los desafíos del futuro
Estos galones pueden durar desde 24 hasta 72 horas de uso continuo, y la recarga es lo que puede generar un gasto diario de G. 400.000. Sin embargo, hay pacientes que llegan a requerir hasta dos galones por día.
Por otra parte, las proveedoras advierten sobre tubos que no son aptos para contener oxígeno medicinal, ya que, con la demanda, algunas personas estarían modificando tubos que se utilizaron para otros tipos de gases. Finalmente, afirman que hasta ahora están pudiendo cumplir con las exigencias, pero la provisión podría verse afectada si esto empeora.