Ya sea a través de contenedores que viajan en barcazas por vía fluvial hasta los puertos marítimos y de allí a su destino final, o bien en forma de encomiendas por vía aérea, realizando varias escalas hasta llegar a su comprador, los cargamentos de drogas buscan sortear los controles y realizar su viaje desde Paraguay hasta los más exóticos lugares.
Es el caso de drogas en el Aeropuerto Internacional Silvio Pettirossi, en diferentes tipos de encomiendas. El pasado 19 de octubre fue detenido en Ciudad del Este un ciudadano brasileño identificado como Francisco Rubén Nogueira Araújo, sindicado como responsable del envío permanente de encomiendas con drogas a diversos países del mundo.
Agentes Especiales de la Secretaría Nacional Antidrogas (Senad) retiraron tres paquetes que fueron depositados por esta persona, dos de ellos con destino a Tailandia y uno a las Islas Maldivas.
Con la presencia de la jueza penal de Garantías Rosarito Montanía y el fiscal Eduardo Royg, los agentes antidrogas procedieron a la apertura y revisión de las encomiendas. La primera consistía en 10 rollos de encajes de colores, en cuya base de cartón iban ocultos unos 483,5 gramos de éxtasis, equivalentes a más de 900 dosis de la droga, cuyo valor comercial es de aproximadamente 50 mil dólares.
Por otro lado, el segundo paquete consistía en dos lámparas portátiles para camping, dentro de las cuales estaban ocultos pequeños paquetes con un total de 205 gramos de cocaína, valuados en unos 20 mil dólares en el mercado asiático. El tercero contenía cuatro vasos térmicos, con una carga de un kilo de cocaína.
El reporte de la Secretaría Antidrogas indica que la modalidad de envío por encomiendas sigue siendo muy utilizada por las estructuras del tráfico internacional de drogas y la institución realiza los controles estratégicos y tareas de inteligencia para detectar los posibles envíos ilícitos.
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