El ministro de Salud, Julio Mazzoleni, señaló que Asunción y el departamento Central continuarán en fase 3 de la cuarentena inteligente hasta el próximo 30 de agosto debido al aumento de fallecidos y el incremento sostenido de casos de COVID-19 que se registran durante los últimos días.

“Elevamos la recomendación de sostener la fase 3 en Asunción y Central hasta el 30 de agosto, con base en la situación actual”, expresó Mazzoleni en conferencia de prensa, esta mañana.

Agregó que en la capital del país se registra un aumento sostenido de casos, que se intenta estabilizar desde Salud Pública. Señaló que la fase 3 de la cuarentena inteligente establece la regulada de las actividades y que la mayoría de los positivos confirmados provienen del relajamiento de la ciudadanía.

“Claramente estamos entrando en la parte más difícil de la epidemia. Entonces hay que extremar todos los cuidados y recursos. Hay responsabilidades desde el Estado hasta la ciudadanía. Tenemos que trabajar juntos, porque en este desafío estamos todos. Salimos todos juntos. Este es un momento oportuno en el que podemos trabajar en la base de hacer más férreo los cuidados”, expresó Mazzoleni.

Alto Paraná y retraso de test de COVID-19

Sobre la situación en Alto Paraná manifestó que suman 14 camas de terapia intensiva y 20 camas convencionales en el Hospital Integrado Respiratorio de Ciudad del Este, donde se encuentra la mayor cantidad de internados a causa del COVID-19. También señaló que este viernes llegan 66 respiradores donados por Estados Unidos y que 120 más llegarían desde Alemania para la próxima semana.

El titular de Salud manifestó que el próximo lunes se firmaría contrato con una proveedora para adquirir nuevos insumos médicos. Además pidió “paciencia” a los ciudadanos por los retrasos de los resultados de muestras de COVID-19 debido a la poca cantidad de insumos y además que varios laboratorios permanecen cerrados a causa de contagios entre su personal.

“Estamos pasando por algunas dificultades que estamos seguros vamos a poder resolver para la semana que viene. Esta dificultad pasa por el aumento de la demanda y lo que tiene que ver con estos brotes que se han presentado tanto en el Laboratorio Central como el Senacsa, que actualmente permanece cerrado”, manifestó.

Por otro lado, el director de Vigilancia de la Salud, Guillermo Sequera, señaló que del 90% de los casos de COVID-19 se registran entre dos zonas del país. Especificó que Alto Paraná continúa en curva ascendente, Central se encuentra estable y que Asunción registra un progresivo aumento de contagios.

“En las últimas tres semanas más del 90% se dieron en dos áreas del país, la mitad en Alto Paraná y la otra mitad entre capital y Central. Alto Paraná está en curva de ascenso, Central se mantiene estable, tiene bastantes casos, pero por la densidad poblacional la tasa de incidencia es aceptable. Asunción presenta un aumento progresivo”, afirmó Sequera.

Asimismo, señaló su preocupación por las ciudades fronterizas con Brasil ante la cantidad de casos registrados principalmente en Ciudad del Este y Santa Rita. Por otro lado, indicó que existirá un nuevo protocolo sanitario para la próxima semana.

Viceministro con síntomas de COVID-19

Por otro lado, Mazzoleni confirmó que el viceministro de Salud, el doctor Julio Rolón, comunicó que presentó síntomas del COVID-19, como fiebre acompañado de dolor de cabeza, por lo que se someterá a la prueba. El médico trabajaba en Alto Paraná y ahora está en aislamiento en Asunción.

Sobre una posible reapertura de fronteras con los países vecinos como Brasil y Argentina no se puede dar fechas específicas, pero que considera probable que ocurra en un tiempo cercano. “Sin dar fechas, eso sería un poco arriesgado”, afirmó. En tanto que sobre la reapertura de vuelos, aseguró que se cuenta con un protocolo elaborado cuando se liberen los viajes en avión en el país.

“Salud Pública está ultimando sobre esta modalidad de viajes, que significa sobre gente que viene durante un tiempo limitado, con un itinerario estrictamente estipulado de antemano, con control y medidas sanitarias. Eso está muy avanzado y esperemos que pueda ser implementado lo más rápido posible, pero siempre condicionado a los indicadores epidemiológicos”, afirmó.

El Ministerio de Salud ayer reportó 5 personas fallecidas a causa de la enfermedad, con lo que ahora son 66 los muertos por COVID-19 en Paraguay. El número oficial de infectados llegó a 6.375 casos, con 315 nuevos positivos en todo el país.


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