La jueza Lici Sánchez rechazó la intervención de la querella adhesiva en el caso del fallecimiento del niño Renato, en el Sanatorio Migone debido a que los médicos del centro asistencial no lo atendieron a tiempo. Argumentó que encontró defectos de forma en la presentación del documento.
Además, la magistrada informó que no se reunieron todos los requisitos para admitir la querella. De igual manera, la magistrada explicó que la familia puede presentar la querella adhesiva, cumpliendo con las requisitos legales, hasta el día de la acusación que es el próximo 14 de abril.
Sánchez señaló que aunque no presenten nuevamente una querella adhesiva mantienen los mismos derechos en su carácter de víctimas.
Familiares de Renato presentaron una querella adhesiva contra los tres médicos imputados por omisión de auxilio por no asistir a tiempo al pequeño antes de su muerte. Se trata de los médicos María Fátima Vasto, José Manuel Ovando y Óscar Feliciano Cabrera.
La jueza Sánchez refirió que los padres tuvieron un plazo de tres días para solucionar esta situación y que tampoco se ratificó cumplido el lapso. “Pasados los tres días se ha traído un poder. Se corrió traslado a todas las partes de las documentaciones, se han opuesto y el Ministerio Público ha dejado en manos del Juzgado la resolución del tema”, afirmó Sánchez.
“El código procesal penal dispone cuales son los requisitos a ser presentados en una querella adhesiva. Al respecto, se ha presentado en representación de las víctimas, los padres de este menor fallecido, invocando tres abogados, pero suscribiendo uno solo”, manifestó Sánchez.
Junta médica
Por otro lado, la fiscal del caso, Natalia Silva, indicó que los médicos tienen que responder a una serie de preguntas en cuanto al procedimiento que se siguió para la atención del pequeño y que ésta es la diligencia principal que se aguarda para determinar responsabilidades dentro del proceso.
En consecuencia, diversos peritos conformarán una Junta Médica que realizará el peritaje en el caso del pequeño Renato.
Antecedentes del caso
Según refieren los datos, el 20 de agosto del 2019, el pequeño Renato fue llevado por sus familiares al Sanatorio Migone. Tras suministrarle un medicamento, se produjo una alteración y empeoramiento repentino del estado de salud del menor, motivo por el cual la madre acudió presurosa y pidió auxilio a los tres médicos que estaban en el cuarto de Urgencias.
Sin embargo, ninguno de ellos se levantó para verificar el estado del paciente, que en ese momento mostraba palidez, según la madre. En la grabación del circuito cerrado del sanatorio se puede observar una supuesta inacción por parte de los médicos que hoy están imputados.
El video también muestra a la madre que regresa junto a los tres médicos y nuevamente solicita el auxilio, pero a pesar de que dos de los médicos eran residentes y que contaban con título profesional que avala que estaban habilitados para prestar auxilio ante cualquier emergencia, los galenos no acudieron a ayudar al paciente.