Niñas y niños que asisten a Teletón comenzaron las clases demostrando que los juegos pueden ser inclusivos. Básquet, Takkyu Volley, boccias y el juego de las sillas, con estas actividades los alumnos iniciaron el año lectivo, jugando entre compañeros con y sin discapacidad. La fundación insta a que se siga impulsando una educación para todos y todas, desde un enfoque de derechos.
Teletón acompaña el proceso de inclusión de más de 500 niños, niñas y adolescentes en sus escuelas.
La educación inclusiva en Paraguay tiene un gran desafío, porque el 83% de la población con discapacidad no ha superado seis años de la educación escolar básica, solo 8% ha realizado algunos años de estudios secundarios y nada más que el 2% ha logrado estudios superiores (SENADIS – 2014).
Teniendo en cuenta estos datos y conociendo la situación de miles de familias que asisten a la fundación, Teletón impulsó esta actividad de recreos inclusivos, demostrando que con ganas y creatividad se puede incluir.
Los recreos también se hicieron en las escuelas de Ximena y Diego, San Vicente de Paul y Roberto Schaerer, respectivamente. Participaron voluntarios, colaboradores de Teletón, y figuras como Melissa Quiñónez, Juan Cáceres y Fer Aguilar.
Cómo se vive la inclusión
“Los padres colaboraron con escombros para las rampas, la tía de Diego, que es arquitecta hizo las medidas y así, logramos construirlas en la entrada y afuera del aula”, relata así la profe Laura Domaniczky, quien fue la primera maestra de Diego y encabezó el proyecto de hacer más accesible, arquitectónicamente, la Escuela Roberto Schaerer.
Por su parte, Lucho Lubetich, jugador profesional de básquet comentó: “me encantó la actividad, conocer a Alex y Naomi. Los chicos con discapacidad a los que les gusta el deporte se tienen que animar a jugar y los profesores deben también hacer el esfuerzo por la inclusión”.
Él participó del básquet inclusivo y destacó que fue una linda experiencia conocer a Naomi, quien asiste a Teletón y su deporte favorito en Educación Física es el básquet.
Que este 2020 sigamos moviendo límites por una educación para todos y todas, desde el juego, desde espacios accesibles y desde la voluntad de generar cambios ¡porque la educación es un derecho!