Una mujer y su hijo resultaron con heridas de gravedad luego de la explosión de una bala de mortero, como consecuencia, la madre sufrió quemaduras en el rostro, mientras que un adolescente de 16 años padeció una severa lesión en una mano, este lunes de noche.

Las víctimas fueron identificadas como Juana López Cañete, de 41 años, y su hijo menor de edad, que fueron trasladados hasta el Hospital del Trauma para recibir atención especializada. Ocurrió en la compañía Hovy de Coronel Oviedo, departamento de Caaguazú.

Acusan a un médico naturalista de regalar este proyectil a la mujer, afirmando que contenía oro en su interior. Hasta el momento, la identidad del denunciado no trascendió, pero se trataría de un hombre de nombre Nicolás. “Con la promesa que tenía oro, mi hermana abrió y explotó”, expresó Feliciana López, hermana de la víctima.

Ocurrió cuando la mujer intentó abrir la bala de mortero con una sierra eléctrica, que al explosionar desfiguró el rostro de la madre y afectó brazo y mano del hijo. Igualmente la onda expansiva alcanzó a otros integrantes de la familia. Ninguna persona advirtió sobre la peligrosidad de manipular este proyectil.

“La señora tiene quemaduras en el rostro, cuello y tórax. El joven se quedó con la mano totalmente negra. Probablemente no sabían qué era o fueron engatusados", expresó el médico Agustín Saldívar, director del Hospital de Trauma.