Un niño de 5 años sufrió graves quemaduras en 15% de su cuerpo luego de manipular un fosforito, que arrojó en un contenedor de nafta, que explotó y le produjo serias lesiones en el rostro, tórax y cuello. Posteriormente fue trasladado desde Concepción hasta el Centro Nacional de Quemaduras y Cirugías Reconstructivas (Cenquer), en Asunción, para recibir atención especializada.

El niño fue derivado por personal de Servicio de Emergencias Médicas Extrahospitalaria (SEME) en un avión de la Fuerza Aérea Paraguaya. Actualmente se encuentra con respirador al cuidado de todo el personal médico y enfermería de terapia intensiva.

“Está muy grave. Tuvo quemaduras en el cuello, tórax y rostro. El fosfórito explotó cerca de un contenedor de nafta. Fue trasladado desde Concepción. Es por eso que siempre hacemos esta campaña de prevención. Un artefacto que es considerado infofensivo. Mañana va a entrar en quirófano”, expresó Bruno Balmelli, director del Cenquer, en contacto con 1000 AM.

Asimismo se registraron dos casos más de niños de 10 y 11 años que ingresaron al centro asistencial tras sufrir quemaduras también por uso de petardos. “Los tres pacientes se quemaron por fosforito. Ingresó un pequeño de 10 años con lesiones en tres dedos de su mano izquierda a raíz de la explosión de un cebollón. Se le amputaron las puntas de su índice y el dedo medio”, afirmó Balmelli.