El herpes o más conocido como “fuego” son llagas que pueden aparecer de manera repentina en diversas partes del cuerpo. Al respecto, la Dra. Fátima Ovando, jefa del Departamento de Control de Infecciones del Hospital de Clínicas, de la FCM-UNA, explicó sobre el mismo.

“Es una infección causada por un virus herpes simple (VHS), una familia de varios virus que siempre está presente. Todo el tiempo hay herpes circulante, que se trasmite mayormente por contacto y lo que vemos a nivel de boca con reactivaciones. La persona tiene su primer contacto con el virus y luego tiene la característica de quedar latente en el sistema nervioso, entonces cada tanto se despierta y se manifiesta con las lesiones que se conoce comúnmente como fuego”, manifestó la profesional.

Según el tipo, estos “fuegos” pueden aparecer en la boca, también en el área genital y estas manifestaciones se reactivan cuando hay alguna alteración en las defensas del huésped.

“Hay personas que son más proclives a padecerlos como los pacientes inmuno-deprimidos como las personas trasplantadas, los niños y ancianos, las personas con algún tipo de cáncer, ya sea de órganos sólidos o hematológicos, pacientes con VIH SIDA, y básicamente lo que hay que hacer es tener cuidado de higiene”, agregó.

Estos cuidados consisten en que la persona con herpes debe tener sus utensilios aparte, que deben lavarse también apartados del resto, intentar no tener contacto muy directo con otras personas, por ejemplo evitar dar besos, compartir las bombillas del tereré, mate y todo tipo de medidas de cautela para que el virus no se expanda. Lo bueno del caso, es que este virus tiene tratamiento.

Un fármaco antiviral que se encuentra disponible en el mercado local, es relativamente barato, no cura de todo, puesto que desaparece el síntoma, pero el virus queda latente en el organismo.

El estrés

La Dra. Ovando resaltó que aunque no se presenten agentes que ocasionan inmunosupresión en los análisis o las pruebas, el estrés es un factor fundamental que también puede desencadenar la aparición de estas llagas.

“En cualquier momento se reactiva y principalmente cuando hay un bajón de las defensas. A veces no encontramos ninguna inmuno supresión más que el estrés, porque actualmente vivimos en un mundo tan acelerado y todos estamos muy estresados, el estrés también produce una inmunosupresión. Así como la diabetes, mal nutrición todos esos son factores que hacen que el virus se presente”.

Finalmente insistió con que la presencia de herpes en cualquier parte del cuerpo, es señal de alarma, aunque no sea necesariamente de algo grave, debe tratarse desde la primera aparición. Asimismo, recomendó evitar la automedicación en estos casos para evitar complicaciones.

“Por supuesto estos casos como ningún otro pueden ser automedicados, ya que los antivirales son de venta libre y las personas van directo a la farmacia. Es importante consultar, sobre todo cuando es el primer episodio, ya tenemos que empezar a buscar. Son señales de alarma que nos dicen que algo está pasando, por eso son muy importantes las consultas con un profesional”.