La madre de la joven que denunció acoso por parte del representante del JEM, fue echada de la misa de Caacupé por portar un cartel que decía “no es galanteo, es acoso”.

El hecho denunciado se dio este domingo, durante la misa presidida por el monseñor Ricardo Valenzuela. Mónica Castañe, madre de María Belén Whittingslow dijo que llegó hasta Caacupé para participar de la misa central pero que los policías le echaron por tener el cartel. Mencionó que habían pedido permiso a las autoridades policiales con anterioridad para no tener problemas pero que de igual manera los tuvieron.

“Ayer fuimos pacíficamente varias agrupaciones de personas, madres contra el acoso, el sindicato de trabajadores despedidos de la Universidad Católica, Amnistía Internacional, Semiunidas, y una serie de gente que acompaña nuestra causa a Caacupé a escuchar la misa sagrada de las 07:00”, empezó contando en comunicación con radio Universo 970 AM.

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Señaló que entró con sus carteles, pancartas, de una manera tan respetuosa como católica, igual que toda la gente que le acompañaba. “Porque respetamos la casa del Señor y yo lo único que quería como madre que voy a tocar el mundo, casa por casa es pedir justicia para mi hija Belén. Entro despacito, sin molestar a nadie, primera fila y mi cartel que dice Belén es Paraguay y el logo de Amnistía Internacional donde dice no es galanteo es acoso”, expuso.

Foto archivo: Fernando Riveros.

Mónica mencionó que Cristian Kriskovich de Vargas, representante del Jurado de Enjuiciamiento de Magistrados (JEM) y Consejo de la Magistratura (CM) por la Universidad Católica, cortejó y galanteó a su hija según resolución 735. “Amnistía después de años de estudios de ambas partes, dice que eso no es galanteo es acoso. Yo he tocado la puerta de la justicia de mi país, pidiendo garantías legales y es una vergüenza. Como mamá no me voy a cansar, le insto al pueblo paraguayo que se pongan en mi lugar y que denuncien los abusos de profesores hacia alumnas”, solicitó.

Continuó contando que una parva de policías se acercan a ella y un comisario le empieza a tocar el brazo diciendo “acá no, fuera de acá y le dije por favor no me toque. Estaban como 15 policías” relató.

“Me voy humildemente respetando la casa de mi Dios como una mamá desesperada, con mi cartelito para entrar y llegarle a Dios en primera plana y que simplemente estos curas encubridores vean lo que están haciendo con mi hija María Belén. Me intimidaron de una manera brutal, me quisieron violentar en mi derecho, yo estaba calladita con mi cartel”, refirió. Contó que le dijeron “usted se tiene que ir a la calle con su cartel”.

Pide que la Iglesia se expida

“A vos te digo Cristian Kriskovich y a vos Iglesia Católica no te tengo miedo, pueblo ayúdennos suplico que denuncien amoralidades contra sus hijos. ¿En qué cabeza cabe que un profesor de la UCA, casado, con hijos, practicante de la Iglesia Católica mande 1600 mensajes amorales, depravados y degenerados hacia una alumna?”, reflexionó.

“Quiero que la Iglesia se expida y que me diga qué poder ejerce Cristian Kriskovich de Vargas, payaso de la justicia, sobre la Iglesia Católica que te mantienen en su estructura de poder. Te digo Cristian Kriskovich no voy a parar, mi familia, Belén y yo vamos a parar hasta que a mi hija se le devuelvan todas las garantías constitucionales que le fueron cercenadas en la república del Paraguay. A mi hija le robaron salud, tiene problemas médicos comprobables, está en el encierro como una paria, en un país vecino que le dio refugio cuando su propio país la trató peor que a una asesina serial” lamentó.

Eugenio Jiménez, ministro de la Corte.

Tráfico de poder

Indicó que lo más grave que en este juicio hay tráfico de poder demostrado porque en ningún momento se permitieron las pericias de la CPU madre de la Católica y de los teléfonos de su hija María Belén. “Simplemente porque el cobarde de Kriskovich le ofrecía a mi hija ponerle un problema para después sacárselo, ¿sabés cómo? diciéndole usted no se acuesta conmigo yo la meto en una bolsa de supuesta compra notas” manifestó la madre de la joven que está en Uruguay como refugiada.

Así también pidió al ministro de la Corte Suprema de Justicia que cumpla con lo que prometió que expediría un dictamen en cuanto a la orden de captura irregular de Belén. Dijo que hoy se cumplen 6 semanas de esa promesa. “Le ruego que como prometió, este miércoles se toque en la plenaria de ministros de corte el punto 16, resuelvan el caso de Belén y le den celeridad al trámite. Hasta hoy sigo confiando en usted, no me haga descreer otra vez en un hombre de justicia que ya tanto pisotean nuestras leyes”.

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