La familia del pequeño Renato Rojas Talavera, fallecido en una supuesta negligencia en el Sanatorio Migone, rechazó el dictamen de la Superintendencia de Salud que fue presentado hoy. Aunque el contenido de este dictamen es “secreto”, la familia del niño fallecido indicó que la misma señala que el protocolo del sanatorio fue aplicado correctamente.

La familia emitió un comunicado que en duros términos lamenta la auditoría de la oficina dependiente del Ministerio de Salud Pública, que tardó 45 días en expedirse. “Rechazamos categóricamente el informe firmado por el Dr. Ignacio Mendoza, quien no solo falta a la verdad, sino también al juramente hipocrático solemne que habrá realizado al obtener el título de Doctor en Medicina y aseverar que los equipos, implementos estaban disponibles al momento del trágico y evitable deceso de nuestro querido Renato”, destaca el documento.

Para los familiares hubo un dictamen “equivocado y parcialista” de la Superintendencia. “La familia lamenta profundamente que para llegar a tan equivocado dictamen, solo hayan tenido en cuenta el informe interesado parcialista y equivocado del Sanatorio Migone; sin dar participación a un informe de los testigos así como de vídeos que han sido profusamente difundidos por todas las redes”.

Asimismo, la familia Rojas Talavera aseguró que se reserva el derecho de acudir a estrados judiciales, tanto en nuestro país como en el exterior para dilucidar la extraña muerte del pequeño.

“La familia de Renato incansablemente y a pesar del tremendo sufrimiento por su partida honrará su memoria y se reservará los derechos que le asisten para buscar justicia tanto en el ámbito nacional como internacional, e intentar que no hayan más muertes evitables en manos de mercaderes de la medicina y del seguro médico hasta llegar a demostrar que su fallecimiento fue una lamentable cadena de desaciertos en un sistema médico mediocre de un sanatorio oneroso”, concluye el documento.