La demanda por filiación fue promovida en el 2017, sin embargo hasta el momento no se ha podido materializar el derecho de identidad de la menor. El supuesto padre de la menor de edad es César Augusto Espínola Almada, conocido empresario en la ciudad de Encarnación, quien falleció en medio del juicio .

La cadena de chicanas procesales producidas por los abogados defensores, luego que el laboratorio no haya detectado ADN en el cuerpo, como resultado de la exhumación practicada, han retardado la sentencia final del caso, según denunció el abogado de la demandante, Hugo Vergara.

El representante legal manifiesta que la Jueza Violeta María Silva sentó precedentes con respecto a la resolución favorable de los derechos del niño y ordenó la realización de la prueba de ADN a los hermanos Tatiana y Denes Espínola, quienes luego impugnaron la resolución adoptada.

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El expediente se encuentra actualmente a cargo del Tribunal de Apelaciones en la niñez y adolescencia de la Ciudad de San Lorenzo. Allí se decidirá si se debe realizar o no la prueba pericial de hermandad, la cual es vital para finalizar el caso.

La defensa de la madre manifestó que situaciones procesales similares se viven en el Juzgado de Lambaré, donde se encuentra abierta la sucesión del causante. El expediente, luego de una serie de recusaciones dentro del juicio, ha quedado a cargo del Juez Joel Melgarejo, quien actualmente debe determinar si suspende o no los trámites hasta tanto se obtengan resultados en el juicio de filiación tramitado en paralelo.

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