Richard Pereira, padre del joven del mismo nombre que quedó parapléjico de por vida tras ser víctima de un caso de “Gatillo Fácil” por parte de policías, denunció este fin de semana que el Estado lo abandonó y dejó a su suerte en paupérrimas condiciones.

Inundados por la crecida del Río Paraguay y en una precaria vivienda en zonas bajas del Cerro Lambaré, viven el joven Richard Pereira y su familia. El padre reconoce que se hizo Justicia en lo penal, pero no en lo civil. Los policías procesados, el suboficial Johnie Orihuela y el comisario Jorge Zárate, recibieron condenas de 20 y 11 años, respectivamente, en febrero de este año.

“En el caso de mi hijo se hizo Justicia en lo penal. Pero ahora quedamos abandonados totalmente por el Estado. El Gobierno nos empujó a venir acá. Hace un mes vinimos acá, pero después del juicio nos quedamos imposibilitados por todos los gastos que implicó”, expresó.

Invitación al canal de WhatsApp de La Nación PY

Añadió que hoy en día, la crecida del río los obliga a abandonar la vivienda. “Es injusto esto, en el estado que está Richard, que esté viviendo así”, lamentó.

Por último, solicitó a la ciudadanía que ayude a ejercer presión sobre el Estado, para lograr una justicia real para el joven que quedó parapléjico a raíz de una irresponsable conducta de policías en un procedimiento totalmente irregular.

Un Tribunal de Sentencia dictó la condena del suboficial Johnie Orihuela a 20 años y del comisario Jorge Zárate a 11 años de cárcel, tras ser hallados culpables de dejar parapléjico a Richard Pereira, luego de recibir un disparo de arma de fuego en la nuca. Ambos cumplirán sus penas en la sede de la Agrupación Especializada.

Lee También: “Padre de Richard Pereira: “Se hizo justicia en parte"”

Dejanos tu comentario