El evento se realizará en busca de una fundación que se denominará “Piecitos Guerreros PY” y para ayudar a niños con “pie bot”.

En la mañana de hoy, desde las 11:00 está prevista la actividad que se desarrollará en el Jardín Botánico con charlas por parte de médicos pediatras especialistas sobre esta dolencia, así como también espacios de recreación y conversación entre madres y padres para compartir experiencia entre los mismos.

El pie equinovaro, también conocido como pie zambo, talipes equinovarus (TEV) o pie bot, es un defecto de nacimiento en el que el pie se encuentra torcido o invertido hacia dentro y hacia abajo, a semejanza de un palo de golf. Sin tratamiento, las personas afectadas pareciera que caminan apoyados en los tobillos.

Señalan que en Paraguay esta afección no está muy visibilizada, por lo que esta actividad pretende sensibilizar a la población, además de acompañar y dar contención a las familias que cuentan con bebés con este problemita traumatológico congénito.

En la ocasión, la charla estará a cargo del Dr. Alberto Navarro, acerca de la experiencia Poseti en nuestro país. Así también, se contará con la presencia del Dr. Humberto Galeano, presidente de la sociedad paraguaya de ortopedia y traumatología infantil.

Es una deformidad congénita del piecito. Afecta a los huesos, los músculos, los tendones y los vasos sanguíneos. Puede presentarse en uno (unilateral) o en ambos pies (bilateral).

Habitualmente el talón apunta hacia abajo mientras que la parte delantera está girada hacia adentro. Si ambos pies tienen esta deformación parecerá que el bebé tiene como una forma de corazón hacia adentro y los pies están más cercanos a la cola. Cuando un bebé nace con los piecitos así, es sumamente llamativo, están como metidos hacia adentro y eso como si las piernitas no se pudieran cerrar alineadas.

Sucede 1 en cada 1000 y tiene un tratamiento eficaz conocido como “método ponseti” que consiste en 3 etapas:

1. Yesitos que se cambian 1 vez por semana, entre 4 a 6 yesos.

2. Tenotomía (pequeña cirugía de los tendones).

3. Uso de férulas (zapatitos mágicos) durante 23 horas los 3 primeros meses y luego entre 16 a 8 horas según cada caso, durante 5 años.