Después de 18 años de vida en el sitio, una familia debió mudarse debido al peligro originado por la construcción de un edificio aledaño. El caso afecta Luz Saldívar y a su familia, quienes abandonaron su casa ubicada en el barrio Mbocayaty de Villa Elisa. La preocupación se origina porque parte de su propiedad cayó a causa de las obras.

Expertos le informaron que la casa puede derrumbarse a causa del desplazamiento del suelo originado por la constructora RSK Real Estate, que afecta a los cimientos. La parte afectada aguarda resarcimiento económico por parte de la firma.

La Fiscalía inició una investigación por exposición a riesgos debido a que los habitantes de la casa estuvieron expuestos a un derrumbe al igual que los obreros.

“Tuve que abandonar esta casa, producto de 18 años de trabajo cuando esta empresa empieza a excavar con máquinas sin contar con ninguna medida de seguridad. RSK Real Estate, así es el nombre de la firma. El último negociador era Raúl Szarán. El primer desplazamiento del suelo en el patio echa mi muralla”, dijo Saldívar.

El alerta llegó cuando parte de una muralla se vino abajo en el patio de su vivienda. La dueña siquiera no pudo construir una nueva pared en el lugar. Saldívar incluso envió una nota a la Municipalidad de Villa Elisa para contar con un fiscalizador de obras. “No tuve nunca retorno”, lamentó Saldívar, en contacto con la RPC.

A partir de ese hecho, Saldívar contacta con la firma para buscar un acuerdo que llegó mediante un contrato. “Freddy Fernando Rodríguez Saldívar se compromete, por parte de la empresa, a arreglar toda mi vivienda. A mi hija le alquilan un departamento, porque no se puede vivir así en un sitio peligroso con niños”, dijo.

Durante esos días, la familia se encontró obligada a abandonar la residencia que con tanto sacrificio le costó construir durante casi dos décadas atrás. “Abandonaron las obras, muchas veces por lluvia, otras veces no sabemos porqué. Cuando ya estoy en la casa que alquilé me dicen que está listo el dúplex (que se habían comprometido a proporcionarle como vivienda)”, afirmó.

Saldívar incluso contrató equipo, que le confirmó que el suelo se encontraba desnivelado, lo que significaba que inmediatamente debían dejar su propio domicilio. “Me dicen que estaba en peligro la casa, que tendría que pagarse una cifra millonaria para recuperar la vivienda. Me dijo que debíamos salir”, expresó.

La mujer y su familia viven en una casa alquilada por sus propios medios a causa del miedo de sufrir daños en la casa de su propiedad. Esto, mientras las obras por parte de la firma RSK Real Estate continúa las obras. “No importó la sensación de un terremoto o que mi hijo sea hipertenso o que yo tuviera que tomar pastillas para dormir, no importó siquiera los documentos que firmamos”, explicó Saldívar.

Saldívar aseguró que la Municipalidad de Villa Elisa debió librar una ordenanza anunciando el inicio de la construcción de un edificio para prever los daños que puedan ocurrir a los vecinos. “Me duele tanto porque yo hice un voluntariado con la municipalidad contando cuentos. Ahora ni siquiera ‘mi solidaridad, señora’. Es muy triste. Vivíamos en los últimos meses arrinconados en un sector de la casa”, finalizó.