En continuación del recorrido de Semana Santa, un equipo periodístico de La Nación visitó el Museo de la ciudad de María de Fe, Misiones, en compañía de su guía Irma Ramírez. La localidad se encuentra a unos 15 kilómetros de la ciudad de San Ignacio, ingresando a la altura del km 220, por el ramal que llega a la ciudad.

El edificio es uno de los más antiguos conservados en el departamento de Misiones. La casa que hoy alberga el museo y anteriormente conocida como la casa de indios. Cuenta con un total de 6 salas temáticas, donde la primera sirve para la recepción de visitantes y contiene piezas del antiguo templo.

El pueblo Santa María de Fe está ubicado a 233 kilómetros de Asunción y forma parte de la Ruta Jesuítica del Paraguay.

Invitación al canal de WhatsApp de La Nación PY

Tallas

Foto: Pánfilo Leguizamón

La construcción data de 1669 con algunas restauraciones, donde se cambiaron los bambúes, tejas y maderas originales. En tanto que las puertas que conectan unas salas con otras fueron abiertas. Allí, una familia guaraní vivía por cada sala, y los descendientes de ellos permanecieron en el sitio hasta mediados de 1970, de acuerdo a la guía.

Allí se observan diversos tallados que datan de la época de las reducciones. En una de las salas se encuentran los santos jesuitas junto al fundador de la compañía: San Ignacio de Loyola junto con sus compañeros San Estanislao de Cosca y San Luis Gonzaga. Igualmente, un tallado en madera de una virgen, de dos metros de altura, se encuentra en la iglesia actual del pueblo.

Varias imágenes conservan un color vivo, mientras que otras son piezas únicas, como la talla de San Pedro, vestido de papa y las piezas completas representando el nacimiento de Jesús. Entre estas tallas se observan, ademas de los corderos y ovejas, animales nativos, como el cerdo salvaje y la paloma, que eran conocidos por los indigenas.

La plaza de Santa María de Fe

La plaza invita al turista a un descanso reparador. La artesanía manual de Santa María se destaca por su colorido, su peculiar bordado y originalidad.

La plaza de la ciudad se caracteriza no solo por la sombra, producto de una exuberante vegetacion, sino ademas, porque se convirtio en el hátitat de varios monos y macacos que son ciudados por la comunidad.

En el templo se aprecia la gran imagen de la Virgen Santa Maria de Fe, en el centro y a los costados, a la izquierda un gran Cristo crucificado y a la derecha el Cristo Resucitado, unicado sobre el sagrario tallado en la epoca de los jesuitas.

En el patio de la Iglesia se conservan grandes bloques de piedras que alguna vez fueron parte del templo original, destruido por un incendio a principios del siglo pasado. En la torre de unos 20 metros de altura están ubicadas dos campanas, que hasta hoy llaman a misa cada domingo.

El museo tiene varios mobiliarios que estaban en lo que fue la antigua sacristía del templo, así como armarios y el cetro que mantiene el cuero de la época.

En esta sala se representa los distintos momento de flagelación de Jesús. Foto: Pánfilo Leguizamón

"Un 70% del trabajo exhibido aquí es trabajo guaraní. En esta sala tenemos el ejemplo de lo que fue la escuela de arte. Los rasgos en las tallas son totalmente indígenas", expresó Ramírez, en contacto con La Nación.

La plaza invita al turista a un descanso reparador. La artesanía manual de Santa María se destaca por su colorido, su peculiar bordado y originalidad.

Dejanos tu comentario