Melbourne, Australia. AFP.
La espalda de Rafa Nadal, el hombro de Serena Williams, los abdominales de Novak Djokovic y Matteo Berrettini, el glúteo de Daniil Medvedev... Después de cuarentenas y confinamientos, lesiones más o menos graves surgen entre las figuras del Abierto de Australia de tenis, que todavía no completó su primera semana.
Catorce días de confinamiento era algo que podía pasar factura a deportistas de alto nivel, especialmente a los que tuvieron que cumplir una cuarentena estricta, sin autorización para salir a entrenar, por haber sido “caso contacto” de un positivo en el avión que les trasladó a Australia. Rafa Nadal no tuvo ese confinamiento estricto, pero su espalda le está dando problemas. Este sábado dijo estar “mejor” de esos dolores, que aparecieron en enero al llegar a Australia y que le impidieron disputar ningún partido oficial antes de este Grand Slam.
“Mi espalda no ha ido mejor día a día. ¡Ha sido hoy cuando ha ido a mejor! Es el primer día que he sentido una mejoría”, comentó tras ganar al británico Cameron Norrie este sábado en la tercera ronda, en tres sets.
El sábado, Djokovic prefirió no entrenar, según la prensa, para ir a hacerse pruebas y conocer el alcance de su problema abdominal, que en tercera ronda, el viernes, estuvo a punto de dejarle fuera de la carrera por el título.
“Lo sé, es un desgarro muscular”, afirmó el serbio tras el partido, que ganó en cinco sets, apelando al orgullo y aprovechando la falta de experiencia de su adversario, Taylor Fritz.
Durante la semana anterior al Abierto de Australia, Serena Williams y Naomi Osaka tuvieron problemas en un hombro, que les llevaron a ser declaradas bajas antes de las semifinales del Gippsland Trophy y del Yarra Valley, respectivamente. Esos contratiempos parecen estar controlados y ambas han sobrevolado la pista, con autoridad, en sus tres primeros partidos en el Abierto de Australia.