Alejandro Galanti difícilmente olvide el 2019. A bordo del Toyota Etios R5 ganó todas las competencias en las que participó, consiguiendo la triple corona del rally de esta parte del continente: fue campeón nacional, cam­peón sudamericano y ganador del Transchaco. Es apenas la segunda vez que en el automo­vilismo nacional se alcanza este récord y la primera con la misma marca.

Su excelente conducción en el Chaco, aprovechando el abandono de Diego Domín­guez, fue lo que terminó por volcar de manera casi defi­nitiva el Campeonato Nacio­nal a su favor. Tras la cita en la Región Occidental, donde vol­vió a ganar después de cuatro años y le dio a Toyota su vigé­sima victoria en este certamen, quedó a un paso del título que lo terminó ratificando ya en el final de la primera etapa del Rally de Santaní. Así, Galanti volvió a la cima del rally nacio­nal después de 12 años y por quinta vez en su carrera.

Mientras que su mano a mano con Domínguez en el Campeonato Sudamericano tuvo una definición emocio­nante. En la última fecha, en el Rally del Atlántico, remontó 17 puntos y superó por 1 solo (187 a 186) al piloto del Hyundai i20 R5. Domi­nio puro y absoluto.

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