Paraguay se posiciona en noveno puesto entre los 10 mayores exportadores de carne vacuna del mundo, con una proyección de exportar unas 500.000 toneladas este año, según estimaciones del Departamento de Agricultura de Estados Unidos (USDA, por sus siglas en inglés). La carne paraguaya apunta a representar el 4 % de toda la proteína vacuna comercializada en el mundo.
De acuerdo con las últimas proyecciones del USDA, Paraguay exportaría un volumen de 500.000 toneladas de carne bovina, lo que posiciona al país entre los diez mayores exportadores del mundo. Con tal volumen, Paraguay superó a Uruguay, que proyecta exportar 485.000 toneladas este año. El principal exportador sigue siendo Brasil con 3.750.000 de toneladas. En la región, el siguiente mayor exportadores es Argentina, con 770.000 toneladas. En total, el USDA estima que la producción mundial al cierre de este año alcance 61 millones de toneladas, de las cuales, la carne paraguaya representaría el 4 %.
EXPORTACIONES AL CIERRE DE JULIO
De acuerdo con datos del BCP, las exportaciones de carne bovina acumulan USD 1.209,4 millones, cifra superior en un 29,2 % al USD 936,3 millones acumulados a julio de 2024. En volumen, por su parte, la variación fue de casi del 10 %, ya que a julio de este año se exportó 212.600 toneladas de carne, mientras que al mismo mes del año pasado el acumulado era de 193.700 toneladas.
Chile continuó al mes de julio como el mayor destino de la carne paraguaya adquiriendo un acumulado de 66.500 toneladas por USD 398,9 millones, seguido de Taiwán, con 27.900 toneladas por USD 164,2 millones, e Israel, con 67.600 toneladas por USD 129 millones. Estados Unidos volvió al cuarto lugar, cerrando julio con una compra acumulada de 20.500 toneladas por USD 115,1 millones. Israel lidera la lista de países que mejor pagaron por la carne tras superar a Brasil con mayor precio implícito promedio para nuestra carne con USD 6.414 por tonelada al séptimo mes.
El precio que el país de medio oriente paga creció 25,4 % con respecto al mismo periodo de 2024. En segundo lugar quedó Brasil, con un precio implícito promedio de USD 6.372, cifra que, en términos interanuales, es 11 % más que en 2024. En tercer lugar sigue Chile, que pagó USD 5.999 por la tonelada de carne paraguaya, que representa un incremento del 16,3 % respecto a lo que pagó en el mismo periodo de 2024.
“Puede ser uno de los grandes beneficiados”
Empresario cárnico uruguayo habla de las oportunidades de Paraguay en el mercado mundial.
El empresario uruguayo Martín Secco, expresidente global de la segunda empresa de alimentos más grande de Brasil y actual director de un frigorífico en Uruguay, aseguró que la demanda internacional de carne bovina atraviesa uno de sus momentos más sólidos, con precios firmes y perspectivas de escasez en los principales mercados de consumo.
En entrevista con Valor Agro en Uruguay, el empresario señaló que, pese a la incertidumbre generada por los anuncios arancelarios de Estados Unidos, “es seguro que faltará carne en los destinos importantes”, lo que mantiene a la industria sudamericana con un nivel de actividad intenso y una absorción plena de la hacienda disponible.
“Podremos tener ajustes menores para arriba o para abajo, pero si sigue así estamos previendo un mercado con demanda sostenida”, indicó Secco, quien resaltó que la fortaleza del sector responde tanto a la solidez del mercado global como a la capacidad de la región para transferir los precios internacionales al productor.
Subrayó que Paraguay se perfila como uno de los grandes beneficiados tras la salida de Brasil del mercado estadounidense, ya que trabaja prácticamente en exclusividad dentro de la cuota de terceros países. Esto le otorga al país una posición estratégica en la provisión de carne a Estados Unidos, junto a Uruguay y Argentina.
“Los volúmenes de carne exportables son predecibles y el mercado conoce bien la capacidad de cada país en función de su hacienda y su faena futura”, explicó Secco. Sostuvo que la reciente carga arancelaria que obliga a Paraguay, Uruguay y Argentina a ingresar con un gravamen total del 36,4 % “termina siendo absorbida por el consumidor norteamericano, ya que el importador traslada ese costo final al precio de venta”.