El sector arrocero está pasando un complicado momento por la histórica sequía que registrada. La bajante del cauce hídrico impacta en la expectativa de siembra, que será rápidamente la más afectada, indicaron desde la Federación Paraguaya de Arroz (Feparroz). “Esta situación viene marcándose y anunciándose hace ya 8 meses y está marcada fuertemente sobre la naciente del río. Mirando los datos, son más de 140 días sin lluvia”, dijo el presidente de la Feparroz, Ignacio Heisecke. Remarcó que la expectativa de siembra de 210.000 toneladas para este año se irá acomodando en función a lo que está sucediendo con la bajante.
A nivel de comercialización, el sector también se ve afectado como los demás usuarios del río, pues los valores de los traslados son más altos. “Nos resta una importante competitividad con los demás productores de arroz de la región. Estamos expectantes a ver cómo continúa esto”, señaló a la 1.000 AM. Heisecke explicó que se van adaptando a medida que van pasando los meses y si bien la lluvia de transición del invierno a la primavera está empezando a llegar, no se está observando en la zona de la naciente, que es donde daría un cambio al río.
Sostuvo que se viene trabajando con el Ministerio del Ambiente y el Ministerio de Industria y Comercio, realizando trabajos quincenales en conjunto como visitas y sondeos. El cauce hídrico a lo largo de todo lo que cruza dentro de nuestro territorio mantiene diferentes comportamientos con cuencas que lo cambian. “Algunas están siendo afectadas por mejorías a lo largo de 6 meses, pero el río bajó más de 2,40 metros desde mayo a setiembre y recién estamos empezando a trabajar”, acotó.
Sobre los precios, agregó que se están manteniendo con buenos resultados todavía y la tendencia es que esto baje un poco en los siguientes meses, entre 20 a 30 dólares menos por tonelada. Hoy la producción arrocera está distribuida en Itapúa, Misiones, Ñeembucú, el Chaco, Arroyos y Esteros, mientras que las industrias se encuentran especialmente en la zona de Misiones y los puertos en Villeta y en Encarnación.