Las condiciones impuestas por la Unión Europea para el ingreso de productos exportables de Paraguay están dentro de lo que cada país, o bloque, puede sostener, dijo el senador Gustavo Leite.
“Sin embargo, sería inaceptable que las exigencias europeas se conviertan en una ley que alcance a todos los productos paraguayos de exportación, para otros mercados”, expresó Leite en comunicación con la 730 AM.
El legislador opinó que la Unión Europea tiene el derecho de establecer reglas para aceptar la importación de productos paraguayos, pero con la salvedad que apuntó.
Cabe indicar que, la Unión de Gremios de la Producción (UGP) había expresado días atrás su disconformidad, respecto a condiciones pretendidas a ser establecidas para las exportaciones paraguayas por parte de la comunidad de la Unión Europea (UE).
“La Unión de Gremios de la Producción (UGP) no está de acuerdo con el flujograma de trazabilidad de la Unión Europea - Rediex para las exportaciones paraguayas”, remarca el posicionamiento de la UGP.
CAPECO CUESTIONA
Desde la Cámara Paraguaya de Exportadores y Comercializadores de Cereales y Oleaginosas (Capeco) cuestionan las imposiciones establecidas por la Unión Europea para la exportación de productos que no provengan de la deforestación, ya que hoy día no se ajustan a las leyes vigentes.
El Ing. Hugo Pastore, vicepresidente de la Capeco, expresó su preocupación por el alcance del Reglamento (UE) 2023/1115, donde se establecen criterios para la comercialización y exportación de materias primas y productos asociados a la deforestación y la degradación forestal.
“Lo que hoy está pretendiendo la UE es de cumplimiento prácticamente imposible”, afirmó en entrevista con el canal GEN.
En tal sentido, explicó que esta normativa restringe el envío de productos que hayan sido producidos en áreas que sufrieron deforestación, ya sea legal o ilegal, posterior a diciembre del 2020.
Pastore señaló que existen dificultades para aplicar esta disposición a rajatabla, teniendo en cuenta que en los silos la producción se mezcla, por lo que no es posible mantener separados los productos de distintos orígenes. “Esto se vuelve una imposición porque la Unión Europea dice que no se pueden mezclar productos de lugares que cumplen y que no cumplen”, agregó.