Entre enero y octubre de este año, el com­plejo cárnico exportó 294.381 toneladas de carne y menudencias bovinas, lo cual representó un 11,2 % de caída frente al año pasado, en ese mismo periodo, cuando se había reportado la salida de 331.685 toneladas, según el Servicio Nacional de Calidad y Salud Animal (Senacsa) en su boletín mensual. Este volu­men significó un ingreso de divisas de USD 1.253.874.026 en los meses de referencia. El acumulado arrojó una varia­ción negativa del 20 % en comparación al 2022, consi­derando que al cierre de octu­bre del año anterior se habían generado USD 1.570.959.510.

El informe del servicio veteri­nario indicó que la cotización descendió en USD 4,78, siendo un punto menos que el mes pasado. En el mismo periodo de 2022, el valor alcanzó los USD 5,20 y era el precio más alto de los últimos 5 periodos desde el 2019. En promedio, los precios de la carne bovina se redujeron un 8 %.

El mercado chileno siguió ocupando la primera plaza con el 42 % de participación al adquirir por USD 498.247.126.

El segundo destino fue Taiwán, que obtuvo el 14 % al comprar por USD 158.780.233. En el ter­cer puesto estuvo Brasil, que adquirió 10 % por unos 122.188.843. Le siguieron Rusia con el 7 %, Provee­duría Marítima 7 %, Israel con el 5 %, Unión Europea 3 %, 1 % Kuwait, y 14 % otros mercados. Los envíos de la carne bovina observaron nuevamente un descenso que llegó al 13 % al concre­tarse la salida de USD 246.777 por USD 1.179.248.384. En el lapso anterior se llegaron a embarcar 283.932 tonela­das por USD 1.476.140.350. Las menudencias bovinas se lograron exportar en lo que va del año un total de 47.603 kilos por un valor de USD 74.625.642.