Este año, la producción de soja se vio afectada por diversos motivos, entre los que lidera la sequía. Al respecto, la Cámara Paraguaya de Procesadores de Oleaginosas y Cereales (Cappro) indicó en su informativo mensual datos que refieren la caída que registró la molienda. Hasta octubre del 2022, la molienda alcanzó 1.866.169 toneladas, lo que representa una caída del 23% si se compara con el mismo período, pero del 2021; y de alrededor de 1 millón de toneladas, en comparación con el promedio de procesamiento acumulado al décimo mes en los últimos tres años.
Solo 45.557 toneladas fueron industrializadas este mes, indicador que consolida a este año como el peor para la industria desde el 2012, recordando siempre que en el 2013 se dio un gran salto en la capacidad para procesar oleaginosas en el país.
MAYORÍA PARARON
El boletín menciona, en paralelo, que se debe tomar en cuenta que la mayoría de las fábricas ya pararon y que el stock de materia prima disponible es limitado, por lo cual se considera que sumando la molienda y exportación en estado natural representa cerca del 97% de soja cosechada.
Acerca de otros granos, los números refieren que la molienda creció de manera significativa superando a octubre todo lo que se obtuvo en el 2021. No obstante, resaltan que no se podrá compensar el volumen perdido de nuestra principal materia prima.
En cuanto a exportación de soja y sus derivados, el documento informa que esto disminuyó un 53% en comparación al año pasado. En octubre se exportaron 100.454 toneladas de productos del complejo soja, con lo que el acumulado del 2022 llegó a 3,75 millones de toneladas.
Bajante resta competitividad a industrias
Desarrollar un plan maestro de manejo integral de los ríos es clave para previsibilidad de la economía.
Además de la sequía que afectó considerablemente la producción primaria, la reducción del nivel de los ríos es otro problema que ha perjudicado a las industrias aceiteras en los últimos años, sostienen desde la Cámara Paraguaya de Procesadores de Oleaginosas y Cereales (Cappro). El gremio señala que la falta de lluvias ha disminuido la posibilidad de aprovechar la principal vía de ingreso y salida de comercio exterior del país, la Hidrovía Paraguay–Paraná, reduciendo la competitividad de las fábricas, publicó el portal Hoy/Nación Media.
La bajante de los ríos ocasionó que la navegación por el Paraná sea imposible y obligó a que el tránsito por el Paraguay se realice con menos carga y a menor ritmo. Para la Cappro es de vital importancia un plan maestro de navegación para la hidrovía, que permita aumentar la cantidad de toneladas que se transporta y reduzca el tiempo de cada viaje, mediante trabajos de mantenimiento, señalización y aplicación de tecnología.
“Desarrollar un plan maestro de manejo integral de nuestros principales ríos es clave para el cuidado del medio ambiente, el ecosistema y las poblaciones ribereñas, además brindará previsibilidad a la navegación que es fundamental para la economía del país”, explicó Sandra Noguera, gerente general de la Cappro.
Según la gerente, es sumamente necesario eliminar o minimizar todos los factores que restan competitividad a nuestros productos nacionales, ya que tienen que competir con los productos de industrias de otros países que cuentan con acceso a puertos marítimos y ciertos beneficios y facilidades otorgados por los propios estados.