Itaú, para su reporte mensual sobre el escenario macro de Paraguay, mantuvo su pronóstico sobre el producto interno bruto (PIB) para este año, en -1%, al igual que su estimación de inflación, en aumento del 8,8%.
En tanto, sostiene que esperan que la actividad se recupere durante el resto del año a medida que se desvanezca el efecto negativo de la sequía y se recupere la construcción. Agrega que la actividad decepcionó en abril luego de un débil primer trimestre débil, debido al exceso de lluvia que afectó al sector de la construcción. La mejora en el caudal del río Paraná también apoyará la actividad a través de la generación eléctrica, añadieron economistas de la entidad.
Con la proyección de una retracción de la entidad, se mantiene entre las entidades que esperan una caída para el año, pero otras incluso prevén un retroceso de casi 2%. Recientemente el mercado interno actualizó su pronóstico, manteniendo la cifra de 0,2%, en línea con el Banco Central del Paraguay (BCP). En tanto, prevé un repunte del 4% para el año que viene.
“La inflación general sorprendió a la baja en mayo, ayudada por los precios más bajos de los alimentos, pero la inflación subyacente (excluyendo frutas y verduras, precios de servicios regulados y combustibles) sigue presionada. Mantuvimos nuestro pronóstico de inflación para este año sin cambios en 8,8%”, agrega. El BCP elevó su tasa de política monetaria en 50 puntos básicos a 7,25% en su última reunión, manteniendo el ritmo de las dos reuniones anteriores. Itaú sostiene que esperan que la tasa de política finalice este año en 7,75%, pero con un sesgo alcista considerando mayores tasas en el exterior.