Al mediodía de ayer se realizó la presentación del libro “El capitalismo no es el problema, es la solución” del historiador alemán y autor de varios libros best seller, de la mano de Agri Terra. Durante el evento habló sobre el éxito de algunos países tras la apertura de sus mercados y como muchos se olvidan de las causas de su éxito.
Rainer Zitelmann, en su libro recientemente traducido al español, señala que el capitalismo no es el problema sino la solución y explica que se demuestra de manera práctica con las experiencias de algunos países que aumentó la cantidad de ricos y de esa manera disminuyeron la pobreza.
De manera a ejemplificar con hechos que se registró en el mundo ubicó a China en medio de la presentación y señaló que después de la apertura al capitalismo tiene éxito, y ese logro se resume en la frase “dejemos que algunos se enriquezcan primero” la idea del economista Deng Xiaopin, quien permitió la apertura comercial en ese país. Zitelmann señaló que esa concepción no solo se aplica a China, sino también a los demás países del mundo en donde se podrían demostrar que mientras más millonarios haya, la pobreza descendería de forma importante. Explicó que esa concepción no solo aplica a China, sino también a los demás países del mundo, debido a que mientras más millonarios hay la pobreza desciende y los últimos 20 años el número de millonarios ha pasado de 470 a 2.775 demuestra de manera práctica cómo mientras más ricos hay, menos pobres hay.
Dijo que en muchas ocasiones se presume que el éxito de China se debe a las acciones que se realizaron a través del Estado, pero aclaró que en el propio producto interno bruto (PIB) del país asiático se evidencia que hay un aporte del 60% del sector privado tanto en innovación, trabajo y seguridad. Sobre ese punto, trajo a colación de que las personas se olvidan de las razones del éxito por lo que se provoca una caída en la libertad económica, lo cual es bastante malo tanto para China como para todo el mundo debido a que todos consumimos productos de ese país. Esa misma experiencia se está viviendo, según el historiador, en Chile, debido a que después de haberse ubicado como el país más próspero los votos vinieron favoreciendo a los socialistas, lo que está produciendo una caída en ese sentido.
“Básicamente hay dos sistemas económicos, el socialismo y el capitalismo. El socialismo es donde nadie es dueño de nada, no existe la propiedad privada, todo es del Estado. Y el capitalismo es donde está la libertad, la libre riqueza, donde cada uno puede generar su riqueza”, señaló. Explicó que la relación dinámica que existe entre estas dos opciones se basa en la cantidad de intervención que se debe generar tanto del Estado como del mercado debido a que asume que “cuando le pones más mercado logras el éxito como China” mientras que cuando hay aumento de “Estado” se observan otros resultados.
Sostuvo que la misma experiencia se vivió con Venezuela, que mantuvo un crecimiento bastante alto hacia 1970, pero tuvo una caída después de que empezaron a direccionarse hacia el socialismo. “Hace unos días estuvimos en Corrientes, pasamos por el río Paraná y están llenos de barcos que comercian, pero básicamente todos eran de Paraguay lo que es bueno para ustedes, pero revela cómo el exceso de regulaciones en Argentina crea una economía más cerrada”, reveló.