La inflación no da tre­gua en Paraguay y se estima cierre el año en 8,8%, según pronostican desde el Banco Itaú, en su informe macro mensual esce­nario Paraguay, mayo 2022. La inflación anual marca nuevos récords, resaltaron los analistas del banco bra­sileño. La inflación mensual se ubicó en 1,5% en abril, por encima de las expectativas del mercado de 0,5% (según la encuesta del BCP). La infla­ción sigue viéndose afectada por los altos precios de las materias primas, sostienen. En términos interanuales, la inflación general aumentó a 11,8% en abril (desde 10,1% en marzo), mientras que el IPC subyacente (que excluye frutas y verduras, precios de servi­cios regulados y combustibles) se ubicó en 8,2% (desde 7,3%).

El Banco Central del Para­guay (BCP) continúa con su ciclo de endurecimiento monetario y decidió por una­nimidad incrementar su tasa de política en 50 pbs, mante­niendo el ritmo de la reunión anterior (llegando a un nivel de 6,75%). El ciclo de ajuste acumula un total de 600 pbs desde agosto del 2021.

El comité de política mone­taria (CPM) resaltó nue­vamente el aumento en las expectativas de inflación en medio de un panorama de alta incertidumbre, mencionan. “Revisamos nuestro pronós­tico de inflación para fines del 2022 a 8,8% (frente a nuestro escenario anterior de 6,5%) debido a la gran sorpresa al alza en abril”, explican.

De esta forma, una perspec­tiva de inflación más desa­fiante llevó al banco a revi­sar su pronóstico de tasa de política monetaria a 7,75% para fines de año, por encima del 7,25% del escenario ante­rior. Para fines del 2023, ahora esperan una tasa de política de 6,75% (desde 6,25% en el escenario ante­rior), aún más baja que la del 2022 a medida que la infla­ción retrocede.

Por otro lado, corrigen su expectativa de crecimiento para el PIB. “Revisamos nuestro pronóstico de cre­cimiento del PIB para 2022 a -1% (en comparación con nuestro escenario anterior de -1,7%) luego de una caída de la actividad menos pro­nunciada de lo esperado en el primer trimestre “, alegan. En efecto, notan que los sec­tores no relacionados con los recursos naturales se man­tuvieron sólidos a pesar de los menores ingresos del sector agrícola. “Para 2023, ahora esperamos un creci­miento del PIB del 5,0%, por debajo del 7,0% en nuestro escenario anterior, ya que el efecto base se vuelve menos favorable”, sostienen.