Las expectativas en cuanto a la apertura del mercado de Esta­dos Unidos para la carne bovina paraguaya son gran­des y el sector está a la espera de los últimos procedimien­tos para que sea una realidad. Esto debido al resultado posi­tivo que dejó la visita de los técnicos de la Dirección de Agricultura a Paraguay.

La mesa de trabajo entre ambos países empezó en el 2018 con la presentación de los formularios para la aper­tura de este gran mercado para el sector productivo de nuestro país, que registró un amplio crecimiento en los últimos tiempos con miras a esta postulación. José Carlos Martin Camperchioli, titu­lar del Senacsa, habló sobre las proyecciones que tienen en cuanto a este anhelo.

El primer y más difícil paso para esta posibilidad se cum­plió tras la visita de los téc­nicos estadounidenses que fiscalizaron las plantas fri­goríficas en el marco del cum­plimiento del principal pro­cedimiento que realiza el país negociante para la apertura del mercado. Se refiere a la equivalencia de los documen­tos requeridos por el país, que generalmente se consideran como requisito excluyente para el logro del objetivo.

“Logramos la equivalen­cia documental después de varias reuniones muy inte­resantes que venimos mane­jando con los Estados Uni­dos, en donde cabe destacar la predisposición de las auto­ridades atendiendo la vir­tualidad. En marzo del 2021 pudimos lograr la equivalen­cia documental, mediante también las gestiones con la embajada paraguaya y con la embajada americana en Paraguay para que se realice la auditoría”, manifestó.

La visita de los técnicos se había concretado en el mes de noviembre del año pasado y los resultados fueron posi­tivos, según las declaracio­nes de Martin, atendiendo los antecedentes que tiene el país en el 2008, cuando tras el arribo de la misión estadouni­dense se rechazó la apertura luego de los resultados negati­vos que dejó la verificación de las plantas frigoríficas.

Esta verificación fue reali­zada en todas las plantas pro­ductoras de carne bovina en donde los productores nota­ron un afianzamiento del país con uno de los mercados más grandes del mundo debido a que, si bien se puntualizaron sobre algunos factores que el sector debía mejorar, no representaban un gran pro­blema para el rubro ante la posibilidad de cambiarlos a tiempo.

“Seguimos esperando a que la apertura del mercado nor­teamericano sea oficial. Estamos confiados y expec­tantes de que podamos ter­minar con esos pasos para que nuestro primer embar­que de carne salga de nuestro principal punto de exporta­ción para que llegue al suelo estadounidense. Estamos hablando de un último paso que necesitamos hacer para que sea realidad”, sostuvo.

El sector productivo aguarda ahora los últimos pasos que corres­ponden al procedimiento que se debe realizar para llegar a este mercado. Martin mencionó que la Dirección de Agricultura tiene 60 días hábiles para enviar el último reporte de la auditoría a la que ellos deben responder para cerrar el ciclo y se dé la apertura. Mencionó que en este mes se cumplen los 60 días para el envío del reporte de parte de las autoridades estadounidenses para que dé lugar a la respuesta que van a preparar para acelerar el inicio de la exportación de carne bovina paraguaya. “Desde nuestro punto técnico sabemos lo que tenemos, sabemos nuestras fortalezas, sabemos nuestras debilidades y la capacidad que tenemos que ha crecido en estos últimos años, así que en la auditoría nos sentimos cómodos porque tuvimos la participación de gente especializada que nos dejó recomendaciones, pero sobre todo recomendacio­nes posibles para que el acuerdo termine por concretarse”, indicó.

En cuanto a la cuota de exportación que tendría el país en el caso de concre­tarse el acuerdo, el titu­lar de Senacsa aseguró que se podría entrar a una más general por ser la primera exportación al suelo nortea­mericano. “Nosotros estaría­mos entrando en una cuota primeramente general para después entrar en una más especial dependiendo más de nuestra performance ya en Estados Unidos, para poder pedir una cuota adi­cional. Pero a priori hay una cuota que sería de 67 mil toneladas y creo que a esa cuota ingresaría Paraguay”, agregó.

Dijo también que de concre­tarse la apertura del mer­cado estadounidense para la exportación de la carne bovina paraguaya sería con­siderada un gran triunfo para el sector ganadero ante el incansable trabajo que vie­nen realizando en cuanto a la mejora de la genética y pro­ducción.