Si bien no se puede calcular concretamente el valor que absorbe el comercio informal, se considera que si hubiera más controles que frenaran la compra ilegal, esta práctica podría desencadenar en mayores recaudaciones para el fisco, que a la vez beneficiaría a la ciudadanía.
Es lo que señaló el presidente del Centro de Importadores del Paraguay (CIP), Elzear Salemma, al ser consultado sobre el escenario actual con relación al contrabando y la mayor recaudación que generan las importaciones según la Dirección Nacional de Aduanas (DNA).
“El contrabando nos afecta a todos, grandes empresarios, pequeños, importadores e industriales por igual, porque repercute directamente en la disminución de las ventas que luego perjudica también al empleo formal”, expresó.
El titular de CIP mencionó que el flagelo del contrabando es un esquema tan antiguo, reiterativo y hasta cansador, pero que sin duda requiere tomar cartas serias para encontrar una solución ante la falta de acciones concretas y severas por parte del Gobierno, de modo a ponerle freno.
“El Gobierno tiene que controlar internamente, vemos que las mercaderías circulan libremente por el país una vez que pasan la frontera con solo pagar alguna coima. Nadie les ataja ni se controla a los comercios a ver si emiten factura legal o si los empleados están en IPS”, sentenció Salemma.
Es así que solicitan acciones firmes al Estado para que ejecute controles y desmantele las redes contrabandistas, ya que solo de esa manera podrá haber temor para accionar de forma ilegal, retornando así las compras al comercio formal que es el que recauda impuestos para los recursos genuinos que a su vez deben ser destinados a mejoras para los servicios de salud, educación y seguridad.
MAYOR RECAUDACIÓN
Con relaciones al aumento en las recaudaciones aduaneras, que en gran medida se da por las importaciones, el representante del CIP subrayó que la DNA está realizando comparaciones con un mal año de pandemia por el 2020, y que evidentemente los números arrojarán incrementos.
Finalmente, remarcó que como gremio solicitaron a la DNA consideración para aplicar los impuestos a la hora de ingresar las mercaderías, en base al precio del flete del periodo prepandémico, que se incrementó de US$ 4 mil a US$ 20 mil incluso por cargamento.