A través de una nota dirigida al presidente de la República, Mario Abdo Benítez, la Cámara Nacional de Comercio y Servicios de Paraguay (CNCSP) elevó su preocupación ante la problemática coyuntural que afecta negativamente al comercio exterior de nuestro país y que es la crisis internacional de precios, solicitando al mandatario se fije un valor referencial en función a los precios de los fletes que se pagaron en promedio antes de la crisis logística mundial.

“Se trata de una crisis logística que se agrava cada vez más, consistente en los elevadísimos costos de los fletes marítimos, especialmente provenientes de Asia/China, que terminan encareciendo tremendamente los distintos bienes”, expresa el texto. “Obviamente, el origen de esta situación es la pandemia del covid-19 y sus nefastas consecuencias. Actualmente, se comprueba ya en nuestro país un incipiente proceso inflacionario, motivo por el cual muchos comerciantes/importadores frenan sus compras y/o las suspenden, irremediablemente”, agrega.

En su afán de proponer acciones que ayuden a resolver la problemática mencionada, la Cámara sugiere, como medida paliativa y transitoria de conveniencia para todas las partes y, especialmente para el consumidor final, la fijación de un valor referencial en función de los precios de fletes que se pagaron en promedio antes de que estallara la crisis logística global. Con esta medida, según la organización, no se tendría un impacto fiscal negativo, ya que el Estado no resignaría ingresos respecto a un escenario normal, aplicando una política fiscal equitativa en tiempos de crisis.

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OTROS FACTORES

La Cámara menciona igualmente que la crisis de la actividad logística se debe además a la falta de contenedores y barcos para transportar mercadería de Asia/China hacia el Hemisferio Sur. “También tenemos la revalorización del yuan de alrededor del 10% en el último año, ocasionó que los fabricantes chinos necesitaran más dólares para pagar los sueldos de sus empleados”, indica la nota remitida al presidente Abdo Benítez. “A esto se sumó una suba generalizada de las materias primas que utilizan los industriales chinos, y la demanda de productos manufacturados creció con la pandemia”, añade.

En este escenario, Estados Unidos y Europa aceptan precios más altos sin grandes problemas, lo que deja a Sudamérica y especialmente a Paraguay, en condiciones muy desventajosas. La mayor demanda también desordena los tiempos de producción, que pasaron de un plazo de 30 - 60 días, hasta 6 u 8 meses, explica la Cámara.

“Asimismo, algunos fabricantes pasaron a pedir el pago por adelantado del 20%, 30% de la mercadería, y el saldo contra documentos de embarque. Hay algunos fabricantes que directamente piden el 100% del pago por adelantado porque argumentan que no saben a cuánto puede cotizar el yuan

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