Según estimaciones del Banco Central del Paraguay (BCP), en el 2020 el sector de construcciones crecería en torno al 3,5%, cifra superior en 2,4 puntos porcentuales a lo registrado en el año anterior, y tendría una participación del 6,5% del Producto Interno Bruto (PIB). Esta mejora se podría explicar por la reactivación gradual de las obras civiles y por la decisión del Gobierno de tomar como ruta de incentivo económico al aumento de inversión en obras públicas, señala el análisis de la consultora Mentu.
Los analistas afirman que para solventar dicho crecimiento el sector requeriría de más créditos. A junio, el saldo de los créditos bancarios a este fue de G. 2.521 mil millones, cifra 9,4% superior interanualmente, mientras que en el sistema financiero fue de G. 52,3 mil millones, 20,8% menos que lo registrado en el mismo período del 2019.
Por otra parte, el aumento de obras civiles y públicas a partir de mayo mejoró la capacidad de pago en este sector, con lo que la tasa de morosidad disminuyó 1,4 puntos en el sector bancario y 2,1 en las financieras, presentándose así una reducción interanual de 42,3% en la cartera de créditos vencidos del segmento.
Mentu enfatiza que en los últimos 10 años el sector de obras en Paraguay creció en promedio al 5,2%; es decir, cada año realizaba un aporte promedio de G. 11 billones en el PIB, totalizando G. 110,1 billones en la década. “La apuesta por el sector de la construcción es porque las obras públicas emplean a una cantidad elevada de trabajadores, no depende directamente de la actividad comercial y genera un efecto multiplicador en el PIB. Cabe destacar que en los últimos 3 años este sector ha empleado en promedio al 7,5% de la población ocupada total del país por año; es decir, más de 249 mil personas”, comentan los analistas de la consultora.
Pero el desarrollo de las obras depende también de la cantidad de insumos disponibles, considerando que la demanda requiere de por lo menos 80 mil bolsas de cemento por día. De esta demanda, se cubre cerca del 40% con la producción de la cementera Yguazú, el 50% con la producción de la Industria Nacional del Cemento (INC) y el restante 10% con la importación.