De cara a las restricciones surgidas tras el brote del covid-19, la Caja Bancaria integró a su estructura organizacional la adecuación de la seguridad de la información, que busca identificar y proponer controles para salvaguardar la confidencialidad, disponibilidad e integridad de la información y los recursos tecnológicos de la entidad.

“La inversión en infraes­tructura digital logró enormes avances en las tramitaciones de la entidad. Uno de ellos es el aho­rro en movilización y seguridad, a más de la rapidez y comodidad que generan las transacciones digitales. Contribuyó para acercarnos a través de dispo­sitivos móviles a afiliados que sobrepasan los 65 años de edad que no pueden trasladarse a las oficinas, por las restriccio­nes dictadas para evitar conta­gios del coronavirus”, afirmó José Caballero, presidente de la Caja Bancaria.

“Ahorramos costos operativos en procesos que generan uso de papel, así como contribuido al impacto relevante medioam­biental, gracias a la implemen­tación de mayor tecnología. Hoy nuestra franja de jubilados ya realizan sus gestiones y cobros de jubilaciones mediante ins­trumentos digitales, tales como las tarjetas de débitos, de cré­ditos, transferencias interban­carias y otros beneficios. Hoy redujimos casi en su totalidad el uso de los cheques como medio de pagos, todo lo hacemos vía electrónica, así como otros documentos, solicitudes y for­mularios que se pueden com­pletar o usar normalmente en forma digital”, dijo.

Invitación al canal de WhatsApp de La Nación PY

Hoy suman cerca de 15.000 afiliados entre jubilados y activos: un data cen­ter, la aplicación (App de la Caja Bancaria) en donde se pueden realizar diversas transaccio­nes, desde conocer el estado de cuentas hasta solicitud de préstamos, carga de datos de censos, entre otros.

Dejanos tu comentario