“El modelo paraguayo: un exitoso plan que ha logrado contener la pandemia y avanzar hacia la reactivación económica”, destaca el portal especializado en notas económicas de la región, América Economía.
Pero la estrategia no se quedó solamente en actuar rápido. El gobierno del presidente Mario Abdo Benítez asegura que gran parte de su éxito se debe a un plan de control y transparencia que implementó en el uso de los fondos extraordinarios otorgados a través de la ley de emergencia sanitaria y que ascienden a US$ 1.900 millones. “Este plan permite hacer seguimiento al desembolso de subsidios sociales, compras públicas de insumos médicos y medicinas, y recibir denuncias de irregularidades”, explica el ministro de la Secretaría Nacional Anticorrupción de Paraguay, René Fernández, en entrevista con América Economía.
Del monto total asignado a la emergencia, unos US$ 500 millones fueron dirigidos al fortalecimiento del sistema de salud y el resto fue distribuido entre subsidios sociales y de servicios públicos, apoyo de micro y medianas empresas, al sistema de jubilaciones, entre otras medidas fiscales y financieras.
Fernández asegura que a través del plan se pudo garantizar un control de los recursos y, al mismo tiempo, fortalecer la gestión de compras públicas del sector salud mediante procesos licitatorios más eficientes y con “mayores medidas de transparencia”.