Como si todos estuvie­ran de acuerdo, ayer de mañana se regis­tró un repentino e intenso movimiento de automóviles, colectivos, motos y camiones sobre la ruta Transchaco, donde apenas existía un leve control de parte de un grupo de militares, quienes verifica­ban constancias de trabajo en uno de los accesos a Asunción en plena cuarentena sanita­ria para mitigar el contagio del coronavirus.

Previo al Día del Trabaja­dor, el movimiento fue simi­lar al que se registraba antes del inicio de la cuarentena el pasado 11 de marzo. Aparen­temente, al igual que el fin de mes pasado, personal admi­nistrativo que realiza tareas de pago a empleados y provee­dores de empresas fue el que tuvo que movilizarse. Ade­más, personas que buscan cobrar sus honorarios antes del inicio de mayo.

El tráfico también se regis­tró de forma constante a la altura del túnel Semidei, en el carril que ingresa a Asun­ción, donde se pudo observar una extensa fila en zona de Loma Pytã. El aspecto posi­tivo, a pesar del casi nulo con­trol policial, fue que todos los pasajeros dentro de las uni­dades del transporte público iban munidos con sus respec­tivos tapabocas.

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El ministro del Interior, Euclides Acevedo, había afir­mado el día anterior que los controles iban a continuar, pero de una manera diferente que sería aplicada cuando se inicie la cuarentena inteli­gente el próximo lunes 4 de mayo. Sin embargo, los con­troles en ruta disminuyeron notablemente antes de esta fecha, como se pudo corro­borar ayer.

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