En Paraguay, el Gobierno dispuso suspender las actividades educativas y eventos que aglomeren personas por un período de 15 días. Dicha medida pretende evitar la propagación del COVID-19 y se tendrían diferentes efectos en la economía paraguaya, según la consultora Mentu.
En lo externo, los precios internacionales muestran tendencia a la baja debido a la menor demanda china, lo que limitaría el ingreso por exportaciones de commodities y la cotización del dólar tendería a la suba. En lo interno, los eventos masivos como conciertos y concentraciones de toda índole quedan suspendidos, lo que afectaría al comercio. El comercio fronterizo disminuiría debido a la merma del turismo de compra.
Entre los factores externos, la importación desde Asia, que en el 2019 representó el 45,4% del total registrado, disminuiría y con ello lo harían las recaudaciones de aduanas.
Entre las consecuencias internas también están los hoteles, que enfrentarían más cancelaciones que el 30% ya registrado con la epidemia del dengue. Los restaurantes tendrían menores ventas porque las personas evitarían ir a lugares de aglomeración. Ello afectaría con más fuerza a los restaurantes más pequeños, que en algunos casos se verían obligados a cerrar.
Las agencias de turismo disminuirían su dinámica de ventas de los paquetes para la Semana Santa. El comercio, los hoteles y restaurantes emplean a aproximadamente 1 millón de personas (27% de la fuerza laboral), a las que afectaría directamente la menor dinámica. La venta de combustibles también disminuiría debido a la menor circulación de personas.
Además de ello, el Estado aumentaría sus gastos en salud durante la duración de la pandemia.
Por su parte, las instituciones financieras tendrían mayor demanda de créditos para paliar la disminución de ventas de los agentes económicos, aunque también podría aumentar la morosidad por los menores ingresos; mientras que las empresas que venden productos químico-farmacéuticos aumentarían sus ventas.
Teniendo en cuenta estos factores relacionados, se espera que durante el mes de marzo la dinámica comercial se retraiga y que eso afecte el crecimiento de la economía para el primer trimestre del 2020.
SIN ATENCIÓN PRESENCIAL
La Subsecretaría de Estado de Tributación (SET), como parte de las medidas de prevención para evitar la expansión del COVID-19, emitió la Resolución General N° 43/20 con la que suspende de manera excepcional la atención presencial en las Plataformas de Atención al Contribuyente (PAC), desde ayer jueves 12 hasta el próximo jueves 26 de marzo del 2020.
En contrapartida, ofrece alternativas para que los contribuyentes puedan realizar sus trámites mediante el uso de la tecnología. Para asegurar que los contribuyentes y profesionales contables puedan realizar sus trabajos sin inconvenientes, la administración tributaria establece medidas excepcionales para la realización de diversos trámites.
Por otra parte, la SET dispone de manera excepcional la suspensión de los plazos administrativos que se inicien o que venzan durante el periodo comprendido entre los días 12 y 26 de marzo de 2020, inclusive, relativos a los procesos de Determinación, Aplicación de Sanciones, Sumarios Administrativos referidos a pedidos de devolución de Créditos Fiscales y de Recursos de Reconsideración.